Los habitantes de Monterrey, capital industrial de México, se abastecían este miércoles de agua en camiones cisterna, tras un racionamiento decretado por las autoridades ante la fuerte sequía que golpea al norte del país.
«La situación está muy crítica, la falta del agua nos afecta bastante, más por los niños y la gente mayor», dijo a la AFP Mercedes Lugo, residente del municipio de Apodaca, que forma parte de la zona metropolitana de Monterrey, de 5,3 millones de habitantes.
Desde el pasado viernes, los usuarios de esa área tienen servicio seis horas al día, tiempo que deben aprovechar para llenar pozos, tanques y todo tipo de recipientes.
El estado de Nuevo León (fronterizo con Estados Unidos) no enfrentaba restricciones de este tipo desde hacía dos décadas.
Semanas atrás los cortes eran de un día a la semana, pero el estiaje provocado por temperaturas de hasta 42 grados centígrados obligaron a endurecer el racionamiento.
Lugo cuenta que su cisterna se vacía rápidamente, por lo que su familia de siete integrantes debe organizarse para juntar agua en botes de 20 litros cuando el líquido llega por tubería.
Aunque los cortes programados son de unas horas, esta mujer se ha quedado sin suministro hasta cuatro días continuos.
– «Ni para beber» –
Ante esa situación, las escuelas de educación básica redujeron los horarios. Los universitarios se encuentran en vacaciones.
Rogelio Hernández, también vecino de Apodaca, tiene que dedicar ahora parte del día a almacenar el líquido.
«La semana pasada sí fueron dos o tres días de falta de agua. No había nada, solo para el baño. Pero ni en las tiendas había agua, se acabó aquí, en ningún lado de la colonia (barrio) había agua ni para beber», relata.
«Nosotros juntamos unos botes de 20 litros, es en lo que almacenamos», añade.
Las represas de Nuevo León se encuentran en niveles mínimos, una situación que se repite en zonas del estado de Baja California, donde hubo protestas en los últimos días en localidades como Ensenada por falta de suministro.
Ensenada forma parte de la zona costera del estado junto con Tijuana y San Quintín.
Para enfrentar la contingencia, las autoridades de Monterrey comenzaron a distribuir agua este miércoles en camiones cisterna para las localidades más afectadas.
Además, informaron que trabajan en la habilitación de pozos para poder extraer agua, una labor iniciada hace varios meses.
La situación se ha tornado tan compleja que a finales de marzo pasado el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, llamó a los industriales de Nuevo León a compartir el agua de los pozos que abastecen a sus empresas.
Monterrey, donde varias grandes compañías tienen sus operaciones, es la segunda zona metropolitana más poblada del país, solo detrás del Valle de México, donde viven 21,8 millones de personas, según cifras oficiales.
Los problemas de acceso al agua potable se extienden por varias regiones de México, de 126 millones de habitantes, desde hace años.
En algunos sectores de Ciudad de México como Iztapalapa, donde viven 1,8 millones de personas, es común que las autoridades racionen el líquido y envíen camiones para paliar la escasez.
AFP.