Desde Estados Unidos surgieron fuertes críticas por parte del Congreso, tras conocerse que Gustavo Petro le pidió a Nicolás Maduro ser garante de los diálogos de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el gobierno colombiano.
El subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian Nichols, manifestó que ese gobierno valora la búsqueda de una paz total por parte del presidente Petro, pero también espera que Colombia siga buscando el restablecimiento de la democracia en Venezuela.
Asimismo, se produjeron otros pronunciamientos del lado de los partidos Demócrata y Republicano.
El senador Bob Menéndez, presidente de comité de relaciones exteriores, afirmó que lo que está garantizando Maduro en este momento «es darle refugio al ELN» y dijo que no entiende «esa postura» como algo que sea positivo para Colombia.
Marco Rubio, senador republicano, lamentó que se haya invitado a Maduro a los diálogos, pero señaló que la decisión de un presidente electo de una nación soberana, «no debe afectar o tener impacto de ningún tipo sobre la política norteamericana respecto a esos grupos que son grupos terroristas”.
Con información de CaracolTv.