En dos albergues de Guayaquil, Ecuador, permanecen desde la madrugada de este miércoles 70 ciudadanos venezolanos, parte de un grupo de 90 personas, que tenía programado retornar a su país la víspera, gracias a un programa humanitario del gobierno de Nicolás Maduro.
El Municipio de esa ciudad tomó la decisión luego de que se confirmara que el Consejo Nacional de Aviación Civil del Ecuador no renovó el permiso de operación de la compañía Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos S.A. (CONVIASA), que es utilizada regularmente para los vuelos humanitarios.
La negativa del órgano ecuatoriano impidió que aterrice en Guayaquil la aeronave, que pretendía transportar a los ciudadanos venezolanos mediante la iniciativa denominada “Vuelta a la Patria”, destinada para los migrantes que tras llegar al país sudamericano y decidieron volver.
Pedro Sassone, cónsul de Venezuela en el Ecuador, en declaraciones a la cadena local Ecuavisa, explicó que se trata del vuelo número 61 desde la nación andina.
El jefe del Departamento de Movilidad Humana del Municipio de Guayaquil, Luis Magallanes, consultado por la Voz de América, dijo que el caso es atendido desde el martes por esa institución y que mientras se busca una solución, brindan atención, alimentación y aseo a los migrantes en los albergues Hogar de Cristo y Volver a Soñar. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) también apoya en ese trabajo.
El funcionario confirmó, además, que en los albergues se atiende a 70 personas, mientras que otras 20 decidieron hospedarse provisionalmente en casas de amigos en la ciudad.
La alcaldesa de Guayaquil, Cynthia Viteri, se refirió al tema a través de su cuenta en la red social Twitter.
Edith Pino, directora zonal de la Cancillería, en declaraciones a periodistas desde Guayaquil, explicó este miércoles que sostuvo conversaciones en las últimas horas con el cónsul venezolano, Sassone, con el propósito de brindar asistencia a los viajeros varados.
Además, aseveró que la Cancillería estableció contacto con la Dirección de Aviación Civil, con el fin de transmitir un pedido del Consulado venezolano para encontrar una solución.
“Estamos en un compás de espera para efectos de que la Dirección de Aviación Civil se pronuncie y autorice el aterrizaje de este vuelo humanitario”, explicó la funcionaria. Aclaró que el pedido del gobierno de Venezuela ahora tiene otra modalidad, la de un “vuelo de Estado”, lo que podría destrabar la prohibición.
Sin embargo, las siguientes horas serán “clave” dentro de este caso, ya que la ciudad de Guayaquil se apresta a experimentar un incremento de su tráfico aéreo, debido a la realización de la Final de la Copa Libertadores de América, este sábado. Esto supone la llegada de numerosos vuelos con hinchas brasileños, ya que el partido lo disputarán dos equipos de ese país, Flamengo y Athletico Paranaense.
Voz de América