El gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, envió este jueves un nuevo bus con migrantes hacia Illinois, estado controlado por el Partido Demócrata, al que responsabiliza de no tomar medidas para contener la migración a Estados Unidos.
«El autobús número 300 con inmigrantes desde Texas acaba de partir hacia Chicago. Como [el presidente Joe] Biden no hace nada, Texas continuará tomando medidas sin precedentes para aliviar a nuestras abrumadas comunidades fronterizas y asegurar la frontera», aseguró en Twitter.
The 300th Texas bus of migrants just left for Chicago.
As Biden does nothing, Texas will continue taking unprecedented action to relieve our overwhelmed border communities & secure the border.
— Greg Abbott (@GregAbbott_TX) November 11, 2022
Chicago, la ciudad más poblada del Estado de Illinois, tiene como alcaldesa a la demócrata Lori Lightfoot, mientras que el gobernador es el también demócrata Jay Robert Pritzker.
El derechista Abbott, reelecto este martes para un tercer período en Texas, insistió en aquel momento en que debe retomarse la construcción del muro en la frontera con México, iniciado por el expresidente Donald Trump.
Se quejó porque su gestión está «haciéndole el trabajo» al Gobierno Federal en lo que respecta a la seguridad fronteriza.
El traslado de inmigrantes a bastiones demócratas se ha convertido en un arma política para muchos en la derecha estadounidense, que aprovechan de denunciar la política de Biden, a quien acusan de haber convertido la frontera con México en un colador.
Miles de migrantes han llegado este año a Estados Unidos desde distintos lugares de América Latina a través de la frontera con México, en busca de mejores condiciones de vida.
Entre el 1 de octubre de 2021 y el 31 de agosto de 2022, fueron detenidas 2,5 millones de personas que entraron a Estados Unidos irregularmente, según datos oficiales.
A mediados de septiembre un grupo de migrantes, en su mayoría venezolanos con niños, fueron enviados a Martha’s Vineyard, una isla que es bastión demócrata y mítico lugar de vacaciones para la élite política del país.
Fueron trasladados en aviones desde Texas pero en vuelos que el gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, otro crítico de Biden, dijo haber organizado.
También en septiembre, dos autobuses con migrantes llegaron a Washington cerca de la residencia de la vicepresidenta Kamala Harris, a quien Biden le ha encomendado encargarse del explosivo tema migratorio.
AFP.