Los seguidores de Gales acudieron en multitud a la isla española de Tenerife para apoyar a su equipo en el Mundial, en vez de ir a Catar, después de que una aficionada sugiriera la idea en un tuit que se hizo viral.
Cuando Gales se clasificó para el torneo por primera vez desde 1958, en junio, Bethany Evans, de 25 años, pensó en ir a Catar, pero se desanimó por el elevado coste y las estrictas restricciones sobre el alcohol.
Así que sugirió Tenerife como una alternativa en Twitter «en broma», pero la idea cobró vuelo, fue retuiteada 200 veces y unos 2.500 hinchas de Gales le dijeron que irían también.
«Seriamente, pensé que seríamos sólo unos amigos y yo, por eso todo esto es increíble», narró Evans, gerente de salud y seguridad de Pontypridd, Gales, que voló a Tenerife el día de la inauguración del torneo con su padre y seis amigos.
Evans explicó que pagó 750 libras (865 euros/905 dólares) por un vuelo a Tenerife y una semana de alojamiento, mientras que ir a Catar le hubiera costado 3.000 libras.
Los pubs y restaurantes de Tenerife, que forma parte de las soleadas islas Canarias, frente a las costas del noroeste de África, desplegaron la alfombra de bienvenida, decorando sus paredes con banderas galesas y poniendo los partidos de Gales en la televisión.
Kelly Spiers, de 45 años, propietaria del pub The Original Wigan Pier, y del bar vecino La Flaca, en Costa Adeje, en el sudoeste de la isla, explicó que tuvo que encargar mas cerveza después de acordar con Evans que retransmitiría los partidos.
Ataviados con camisetas rojas de fútbol de Gales y gorras, cientos de aficionados de Gales abarrotaron los dos bares para ver el empate a uno de su equipo con Estados Unidos en su primer partido el 21 de noviembre y su derrota por 2-0 ante Irán el viernes.
«Muchos de nosotros nos hemos quedado sin voz por estar gritando por todo el bar intentando tomar los pedidos, porque son muy ruidosos», dijo Spiers, que es de Irlanda del Norte.
Spiers, que lleva 26 años viviendo en Tenerife, dio a los cócteles nombres galeses y contrató a un coro para actuar en la media parte del partido decisivo ante Inglaterra este martes.
Un empate bastaría a la archienemiga Inglaterra para clasificarse a octavos de final, mientras que Gales necesita ganar y esperar que Estados Unidos e Iran empaten.
Los aficionados galeses llenaron otros bares y restaurantes de Costa Adeje, bordeada de palmeras, así como de la cercana Los Cristianos y otras localidades costeras repartidas por Tenerife, la más visitada de las islas Canarias, donde viven unas 93.000 personas.
Tony Lankshear, que trabaja en el bar Hoops de Los Cristianos, dijo que ha habido aficionados galeses «todas las noches» desde que comenzó el torneo.
«La cosa tuvo éxito. Se corrió la voz entre los aficionados galeses, y muchos se dijeron ‘venga, vamos y organizamos una fiesta en Tenerife'», explicó.
AFP