Una sala de la Corte Suprema de Perú inició este jueves la audiencia para decidir si el expresidente Pedro Castillo permanecerá en prisión por al menos 18 meses bajo cargos de rebelión y conspiración, tras su fallido autogolpe.
Mientras tanto, decenas de manifestantes que piden la liberación del exmandatario acampan en los exteriores de una prisión policial al este de Lima, donde el exgobernante está detenido.
Tras su intento de autogolpe el 7 de diciembre, Castillo fue destituido por el Congreso y detenido, lo que desató protestas en gran parte del país, que han dejado hasta el momento siete fallecidos y unos 200 heridos.
El gobierno de Dina Boluarte, la vicepresidenta que tomó el mando tras la caída de Castillo, declaró el miércoles un estado de emergencia por 30 días, lo que permite a las Fuerzas Armadas participar de las labores de seguridad interna.
Este viernes permanecían cerrados cuatro aeropuertos del sur del país (Ayacucho, Arequipa, Cusco y Puno), con turistas varados y la suspensión del servicio de trenes en la turística Machu Picchu.
Los manifestantes advierten de más protestas este viernes para exigir la liberación de Castillo, la salida de Boluarte, el cierre del Congreso y la convocatoria a nuevas elecciones.
La sesión del Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria para decidir sobre la prisión de Castillo, que preside el magistrado Juan Checkley, se realiza en forma virtual en ausencia del exgobernante y de sus abogados.
Uno de sus integrantes mencionó que Castillo se negó a recibir la notificación. Ante la negativa, se asignó el caso a un defensor de oficio.
La audiencia se inició con la intervención del fiscal Alcides Díaz, quien sustenta las imputaciones «sobre el golpe» de Estado. Considera que el exmandatario es «coautor» de la frustrada intentona junto a quienes fueran sus primeros ministros, Betsy Chávez y Aníbal Torres.
La fiscalía pide una prisión preventiva de 18 meses contra Castillo.
Díaz explico que, de ser hallado culpable en un juicio, Castillo podría recibir hasta diez años de cárcel.
La audiencia estaba prevista para el miércoles pero se postergó a pedido de los abogados de Castillo, que demandaron más tiempo para conocer los fundamentos de la acusación.
AFP