Un juez federal sostuvo ante familiares de víctimas de los dos accidentes del Boeing 737 MAX que no tenía autoridad para acceder a sus solicitudes y modificar un acuerdo que alcanzaron el fabricante de aviones y el gobierno estadounidense.
«Si el Congreso hubiera investido a esta corte con un amplio poder para garantizar la justicia en un asunto como este, no dudaría», escribió el magistrado Reed O’Connor en una decisión divulgada la noche del jueves.
Pero los textos vigentes «no permiten remediar el perjuicio» sufrido por los demandantes, agregó, indció el juez en Forth Worth, Texas (sur).
Según un acuerdo de comienzos de 2021 entre Washington y Boeing, el grupo reconoció que dos de sus empleados indujeron al error a las autoridades en sus evaluaciones para e la certificación del avión modelo 737 MAX y accedió a pagar 2.500 millones de dólares en multas e indemnizaciones.
Como parte del acuerdo, el Departamento de Justicia de Estados Unidos consideró que el grupo aeronaútico no podría ser procesado por los accidentes aéreos de su modelo 737 MAX, con la empresa Lion Air en octubre de 2018 y con Ethiopian Airlines en marzo de 2019. En total murieron en ambos siniestros 346 personas.
Sin embargo, las familias de las víctimas alegaron no haber sido consultadas sobre el acuerdo y solicitaron a finales de 2021 su cancelación o modificación.
Si embargo, este viernes en su decisión el juez destaca que tiene «legítimas preocupaciones sobre el fondo del acuerdo», pero no «la posibilidad de decidir si (el acuerdo) es realmente desproporcionado respecto a la conducta delictiva flagrante de Boeing».
También, consideró que el gobierno de Estados Unidos actuó «de buena fe» en medio de sus conversaciones con las familias de las víctimas.
Paul Cassell, uno de los abogados de las familias, Paul Cassell, sostuvo en una nota enviada a la AFP que estaban «decepcionados» por la decisión del juez, y que tenían la intención de apelar.
AFP