El más reciente informe de Transparencia Internacional catalogó a Venezuela como el país más corrupto de América con una puntuación de 14 sobre 100, seguido de Haití con 17 puntos y Nicaragua con 19. Desde 2021, Venezuela se ha mantenido con la misma calificación según la medición, aunque cabe resaltar que, en general, la región no presentó mayores avances.
Haciendo eco de este estudio, EL TIEMPO conversó con Transparencia Venezuela para obtener más detalles sobre por qué la lucha contra la corrupción sigue siendo una tarea pendiente en Venezuela, que según la organización, no solo se ve inmerso en la llamada “corrupción simple” sino que es la “gran corrupción” la que realmente arropa a la nación.
Luego de años de seguimiento e investigaciones, Venezuela hoy suma 141 casos de corrupción que se investigan en 25 países. La mayoría ligados al gran desfalco que sufrió la principal empresa del país: Petróleos de Venezuela (Pdvsa).
Transparencia Venezuela –que prepara su último informe con actualizaciones de los casos- detalló al diario colombiano que entre los países en los que investigan más tramas de corrupción están: Estados Unidos con 57 casos investigados (algunos ya con sentencias), le sigue Argentina con 16 procesos, España con 11, Colombia con 8 y uno en Haití, este último descubierto luego del terremoto de 2010, pues los fondos de PetroCaribe que debían usarse para la catástrofe nunca aparecieron y de ahí la denominación de “gran corrupción”.
“La gran corrupción es una expresión usada para describir aquella que penetra los niveles más altos de gobierno, generando graves abusos de poder y distorsionando las funciones centrales de gobierno”, explica el informe de 2018 de Transparencia Venezuela (TV), que además agrega que una característica de este concepto es que su práctica va en perjuicio de lo económico pero también de los derechos y libertades fundamentales generado violaciones de los derechos humanos.
Además de los países anteriormente mencionados, también hay causas que se investigan en Andorra, Luxemburgo, Portugal o Ecuador. En total, Venezuela ha perdido 64.000 millones de dólares en al menos 15 años por cuenta de las tramas de corrupción.
Para ponerlo en perspectiva, el presupuesto de la nación para este 2023 es de 170.703 millones de bolívares que al tipo de cambio oficial de hoy representan 7.112 millones de dólares. Por otro lado, las reservas internacionales de Venezuela suman unos 10.338 millones de dólares.
“Lo particular de estos casos es que la mayoría son producto del desfalco a Pdvsa. Todo está catalogado como gran corrupción porque tiene 4 características: incluye a terceros países, afecta a la población, se involucran grandes cantidades de dinero y el impacto sobre la población, dice a EL TIEMPO uno de los investigadores de Transparencia Venezuela.
Por su parte Mercedes de Freitas, directora ejecutiva de la organización, insiste en que “la gran corrupción de Venezuela ha llegado a tal nivel que ha dejado a los venezolanos en indefensión. No tenemos a dónde acudir porque todos los órganos públicos están capturados por la red de corrupción que además tiene alianzas con el crimen organizado”.
En total, 14.865 personas están involucradas de manera directa o indirecta en las investigaciones, según la base de datos de Transparencia Venezuela (TV). Esto incluye: agentes de registros de empresas, banqueros, asesores bancarios, firmas de contadores, auditores, representantes de corretajes inmobiliarios, asesores y vendedores de arte, ministros, funcionarios públicos y otros.
El sector del arte, la compra de inmuebles, relojes y animales como caballos, son algunas de las excentricidades adquiridas con el dinero producto de la corrupción, sostiene TV que insiste en que muchos de los procesos han sido difícil de seguir porque no todos los países tienen la información pública.
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