El presidente Vladimir Putin anunció este martes que Rusia suspende su participación en el tratado de desarme nuclear New Start y amenazó con realizar nuevas pruebas nucleares si Estados Unidos las hacía primero.
Firmado en 2010, este tratado es el último acuerdo bilateral de este tipo que vincula a ambas potencias.
Rusia ya había anunciado a principios de agosto la suspensión de las inspecciones estadounidenses previstas en sus instalaciones militares en el marco del acuerdo, asegurando actuar en respuesta a los obstáculos estadounidenses a las inspecciones rusas en Estados Unidos.
«Quieren infligirnos una derrota estratégica y atacan nuestras instalaciones nucleares, por lo que me veo obligado a anunciar que Rusia suspende su participación en el Tratado (New) Start», declaró el presidente ruso en un discurso fuertemente hostil hacia los occidentales.
También acusó a estos últimos de haber ayudado a Ucrania a modernizar drones para enviarlos a objetivos estratégicos, en referencia a las recientes explosiones en la base de bombarderos de Engels, a unos 500 kilómetros de la frontera con Ucrania.
Putin pidió a las autoridades rusas que se mantuvieran «listas para los ensayos de armas nucleares» si Washington los realizaba primero. «Nadie debe alimentarse de ilusiones, la paridad estratégica podría verse alterada», recalcó.
Además, calificó de «teatro del absurdo» el hecho de que la OTAN reclame que Rusia aplique New Start y autorice «el acceso a las inspecciones de las instalaciones nucleares militares» rusas.
«A través de los representantes de la OTAN, nos envían ultimátums: +Ustedes, Rusia, hagan todo lo que acordamos, en particular New Start, y nosotros haremos lo que queramos», acusó el líder del Kremlin.
Putin sugirió que la OTAN se uniera a New Start para lograr un tratado justo, «porque dentro de la OTAN, Estados Unidos no es la única potencia nuclear».
«Francia y Gran Bretaña también tienen arsenales nucleares, los están perfeccionando, modernizando y apuntando contra nosotros», subrayó.
AFP