La principal tasa directriz de la Reserva Federal estadounidense, que sube desde hace un año para tratar de contener la inflación, podría seguir aumentando más allá de 5,1%, el tope esperado hasta ahora, advirtió el presidente del banco central, Jerome Powell.
«Los datos económicos más recientes son más sólidos de lo esperado, lo cual sugiere que el nivel final de las tasas de interés podría ser más alto de lo previsto», afirmó Powell ante una comisión del Senado.
La Fed actualizará sus previsiones económicas el 21 y 22 de marzo, durante su próxima reunión de política monetaria.
Luego de varias fuertes subidas de tasas, la Fed comenzó a moderar las alzas, que igualmente continuaron, en busca de enfriar la economía bajando el consumo y la inversión al encarecer el crédito.
En su último encuentro, el primero de febrero, adoptó un incremento de un cuarto de punto, una cifra considerada estándar por el mercado.
Pero según Powell la tendencia podría volver a cambiar. «Si todos los datos indican que un ajuste más rápido se justifica, estaríamos dispuestos a aumentar el ritmo de alzas de tasas», dijo Powell a los legisladores.
Las tasas se ubican en 4,5-4,7% contra 0-0,25% durante la pandemia, cuando la Fed buscaba impulsar la alicaída demanda.
«Aunque la inflación se moderó en los últimos meses, el proceso de reducción a 2% (el nivel considerado sano por la Fed, ndlr) será largo», añadió el titular del banco central.
La fortaleza del mercado del empleo, el gasto de los consumidores, la producción industrial y los datos de inflación de enero dieron cuenta de una reversión parcial de tendencia, probablemente debido a un clima excepcionalmente benévolo en enero, arriesgó Powell.
– Fortaleza económica –
En reacción a los comentarios de Powell, la bolsa de Nueva York, que abrió en compás de espera antes de esta intervención que el titular de la Fed repetirá mañana ante legisladores de la Cámara de Representantes, cayó con fuerza.
El índice industrial Dow Jones perdió 1,72%, el Nasdaq de valores tecnológicos cedió 1,25% y el S&P 500 bajó 1,53% en la campana de cierre.
Según el índice PCE, el preferido por la Fed, la inflación ascendió en enero a 5,4% en 12 meses, ligeramente por encima del dato de diciembre (5,3%).
En tanto el índice de precios al consumo (CPI por sus siglas en inglés), mostró una ligera distensión, a 6,4% a 12 meses en enero frente a 6,5% en el año móvil cerrado en diciembre. Sin embargo, en la comparación mes a mes, Estados Unidos registró un incremento de precios por primera vez desde septiembre, de 0,5% sobre el último mes de 2022.
La tasa de desempleo también muestra la fortaleza de la mayor economía mundial, al colocarse en 3,4%, un mínimo en más de 50 años.
Uno de los gobernadores de la Fed, Christopher Waller, indicó el jueves que apoyaría un incremento de tasas para llevarlas por encima de 5,4% en los próximos meses si la inflación no se modera más rápidamente y el mercado laboral sigue exultante.
«Para restaurar la estabilidad de precios, tenemos que ver una menor inflación en este sector (ndlr: por los salarios)», resumió Powell este martes.
Los salarios al alza impulsan la demanda y con ello las subidas de precios.
«Mantendremos la ruta hasta que el trabajo esté hecho», dijo una vez más Powell.
AFP.