La policía de Hong Kong detuvo a cuatro personas por actos «sediciosos» y «conducta desordenada» este sábado, en vísperas del 34º aniversario de la matanza en la plaza de Tiananmen de Pekín.
Según explicó la policía, cuatro personas fueron detenidas por «conducta desordenada en el espacio público» y por «actos con fines sediciosos».
Además, otras cuatro personas son sospechosas de «alteración del orden público» y fueron detenidas para «facilitar la investigación», indicó la policía en su página de Facebook, sin precisar los nombres de los detenidos.
Uno de los arrestos se produjo en una concurrida calle del distrito comercial de Causeway Bay, donde el artista Sanmu Chen se puso a gritar sin parar: «¡No olviden el 4 de junio! Gente de Hong Kong, ¡no tengan miedo de ellos!», constataron periodistas de AFP.
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Un policía le gritó que «dejase de pronunciar palabras sediciosas» y luego las autoridades se lo llevaron a un autobús policial.
Otra artista de «performance» conocida, Chan Mei-tung, que estaba vagando por la zona, también fue detenida.
Los agentes también detuvieron a una pareja de jóvenes que llevaban un crisantemo blanco, una flor que en general se utiliza para conmemorar una pérdida o en señal de luto.
Al ser preguntados si estaban siendo detenidos, el hombre que llevaba la flor dijo: «no tengo ni idea», mientras la policía se lo llevaba.
Hace treinta y cuatro años, un domingo, las fuerzas armadas chinas irrumpieron con tanques en la plaza Tiananmen de la capital china para atajar unas protestas pacíficas que reclamaban desde hacía semanas un cambio de régimen político.
La represión del 4 de junio de 1989 es un tema muy delicado en China, y las conmemoraciones de las víctimas de la matanza (centenares, o incluso más de 1.000, según algunas estimaciones) está prohibida en China continental.
Durante décadas, Hong Kong era la única ciudad de China donde se celebraban homenajes para las víctimas con fuerte afluencia de público, pero en 2020 el gobierno chino impuso en la excolonia británica una restrictiva ley de seguridad contra cualquier acto disidente, tras unas inmensas (y en ocasiones violentas) manifestaciones prodemocracia.
Desde entonces, los actos conmemorativos de la masacre de Tiananmen están prohibidos y sus organizadores han sido arrestados y acusados en virtud de la ley de seguridad.
Este año, las autoridades rechazaron confirmar si ese tipo de actos están prohibidos, limitándose a repetir que «todo el mundo debería actuar de acuerdo con la ley».
AFP