Un hombre fue condenado a 17 años de cárcel por secuestrar a una mujer y someterla a abusos sexuales durante 31 años, informó la Fiscalía.
Arrestado en enero de 2020, Matías Salazar deberá cumplir una «pena de 17 años y dos meses de prisión» por «violencia sexual, amenaza y violencia psicológica», publicó en Twitter el fiscal general del régimen, Tarek William Saab.
#AHORA @MinpublicoVEN logra condenar al #Aberrado Matías Salazar, a cumplir la pena de 17 años y 2 meses de prisión: por el #delito de Violencia Sexual, Amenaza y Violencia Psicologica: dicho sujeto mantuvo en #Cautiverio para así Abusar sexualmente a una de sus víctimas por más… pic.twitter.com/rc1OHJSuwA
— Tarek William Saab (@TarekWiliamSaab) June 23, 2023
El caso, que conmocionó al país, se conoció luego de que una mujer identificada como Morella León huyera del departamento donde estuvo cautiva por 31 años en una población próxima a Maracay, estado de Aragua.
León era forzada a tener relaciones sexuales a cambio de agua y alimentos, según reportes de la prensa local.
El hombre «mantuvo en cautiverio para así abusar sexualmente a una de sus víctimas por más de 30 años», subrayó Saab.
Otra mujer -que por 23 años mantuvo una relación con Salazar y de quien tuvo una hija- lo denunció poco después del escape de Morella León por violencia psicológica y solicitó una orden de alejamiento, de acuerdo con los medios de comunicación locales, que en su momento reportaron que ella también fue víctima de secuestro.
El fiscal del régimen no menciona ese caso para la presente condena.
Además, Salazar estaba casado, pero su esposa negó a la prensa que sufriera abusos.
Lo ocurrido recuerda casos como el de Pedro Vallejos en Argentina y Josef Fritzl en Austria.
Vallejos fue detenido en 2009 por la violación de tres hijas durante más de 15 años de secuestro y tres de los siete hijos fruto de esos abusos, en la provincia argentina de Corrientes.
Fritzl fue sentenciado ese mismo año a cárcel de por vida por el asesinato de uno de los siete hijos-nietos que tuvo con su hija, a la que mantuvo cautiva en un sótano en su casa en Amstetten entre 1984 y 2008. Fue apodado como ‘El Monstruo de Amstetten’.
AFP.