Indira Almeida-Pardillo, vocera del Aeropuerto Internacional de Miami, informó que este fin de semana tuvieron unos 1.000 vuelos demorados por el clima.
«Se debe en gran parte al problema del tiempo, siempre que hay tormentas eléctricas hay que parar las operaciones en el aeropuerto, se suspenden todos los vuelos que entran y salen», comentó en el programa Dígalo Aquí.
Almeida-Pardillo indicó que las personas que van a viajar tienen que entender que debido a una ley federal no se puede salir cuando las tormentas eléctricas están a una milla del aeropuerto.
«Hace un par de semanas, hubo varios vuelos que tuvieron que ser desviados a otros aeropuertos y las personas tuvieron que buscar otros medios de transporte para llegar a Miami», explicó.
Si un vuelo se demora por más de tres horas por «culpa de la aerolínea», los pasajeros tienen derecho a pedir su dinero de vuelta, añadió la vocera.