Los precios del petróleo retrocedieron el viernes al final de una semana de ganancias y recuperación impulsadas por las buenas noticias sobre la inflación.
El precio del barril de Brent del Mar del Norte para entrega en septiembre cayó un 1,83%, cerrando en 79,87 dólares.
El precio del barril de West Texas Intermediate (WTI), con vencimiento en agosto, descendió a su vez un 1,91%, hasta los 75,42 dólares.
«Tenemos derecho a recoger ganancias porque los precios han subido varios dólares en las últimas dos semanas», comentó Andy Lipow, de Lipow Oil Associates.
Para Lipow, la consolidación también se debe a las inquietudes ante la brecha entre las previsiones actualizadas de la Agencia Internacional de Energía (AIE) y la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
La AIE revisó por primera vez a la baja su estimación del crecimiento de la demanda de petróleo para 2023 hasta los 2,2 millones de barriles diarios frente a los 2,4 anteriores. Por su parte, la OPEP elevó su proyección hasta los 2,4 millones, respecto a los 2,3 que previa.
Para 2024, el aumento de la demanda de petróleo prevista por la OPEP es hasta el doble de lo pronosticado por la AIE, de 2,2 millones de barriles por día contra 1,1.
Ante estas diferencias, el mercado duda, según Andy Lipow, «y esperará a que Arabia Saudí y Rusia reduzcan significativamente su producción».
“Esta es la primera cumbre con la Celac que tenemos en ocho años, y las regiones están alineadas. Es claro el daño colateral en otras partes del mundo a partir de la agresión rusa, que ha causado daño y fragilidades, que ha creado inseguridad alimentaria y aumentado la inflación. Todo esto probablemente se discuta (en la cumbre), pero el presidente Zelensky no va a asistir”, dijo el agente oficial. Y recordó que ya hubo oportunidad para discutir la guerra y la posición frente a Moscú en la reunión de Copenhague, donde participaron representantantes especiales rusos con una “activa participación en la discusión”. “Esta es una oportunidad para escuchar a nuestros socios de la Celac sobre cómo poner fin a esta agresión”, deslizaron para explicar la negativa.
Hace algunas semanas, durante un breve encuentro con la prensa difundido pro Europa Press, el presidente ucraniano había dicho que el español Pedro Sánchez, que acaba de asumir al frente del Consejo de la Unión Europea, lo había invitado a la reunión prevista para el 17 y 18 de julio. Pero denunció que algunos presidentes y dictadores regionales habían truncado su viaje, presumiblemente por sus lazos con Rusia, aunque no especificó cuáles. Varios países del bloque latinoamericano mantienen estrechas relaciones económicas y políticas con la Federación Rusa -por caso, en abril, el canciller ruso Sergei Lavrov visitó Venezuela, Nicaragua, Cuba y Brasil- por lo que condenar la guerra en Ucrania les hubiera generado un conflicto interno.
Con información de Infobae