Con millones de descargas en su lanzamiento a inicios de julio, Threads, la nueva red social de Meta (casa matriz de Facebook e Instagram), ya siente la resaca entre la fuerte caída de la actividad en la plataforma y la búsqueda de su identidad.
«Threads tiene todavía mucho que probar», estimó Jasmine Enberg, analista de Insider Intelligence. La aplicación «no puede sobrevivir en el largo plazo siendo nada más que una alternativa a Twitter o bien, una extensión de Instagram», afirmó.
En solo cinco días, se crearon más de 100 millones de cuentas en Threads, luego de su puesta en línea el 5 de julio, sobretodo gracias a una inscripción muy simple desde Instagram. Desde entonces, la aplicación se ha descargado más de 184 millones de veces, según Data.ai Intelligence.
Twitter tiene alrededor de 200 millones de usuarios regulares, mientras que la actividad en Threads bajó a la mitad en una semana, según la empresa de marketing Similarweb.
Los usuarios activos diarios en móviles con sistema operativo Android pasaron de unos 49 millones a solo 23 millones entre el 7 y el 14 de julio, de acuerdo con la consultora. Y el ‘engagement’ -tiempo que los suscriptores pasan a diario en la aplicación- cayó de 21 a 6 minutos en el mismo periodo en Estados Unidos.
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«Fue inteligente proponer Threads a través de Instagram para que las inscripciones despegaran de inmediato. Y, dadas las frustraciones actuales con Twitter, el momento para hacerlo estuvo bien escogido», subrayó Enberg.
«Pero Meta todavía tiene mucho por hacer para mantener la atención de sus usuarios, creando una identidad, agregando herramientas, incluyendo algunas funciones básicas», agregó la experta.
«La aplicación de conversaciones basada en texto de Instagram», tal como Threads se define, se parece mucho a Twitter desde el inicio, pero aún no es posible enviar mensajes privados a los usuarios o hacer una búsqueda en los contenidos.
«YO ADORABA TWITTER»
«Es un poco rudimentario, pero está bien que el jefe de Instagram sea transparente con lo que falta y con lo que van a agregar», destacó Lauren Brose, directora de marketing de una empresa tecnológica emergente.
Esta neoyorquina se unió a Threads «por curiosidad», por medio de la notificación que recibió en Instagram. Después cerró su cuenta de Twitter.
«Hace un año, yo lo adoraba (Twitter). Era un sitio donde la gente más educada exponía sus comentarios e informaciones (…) Y la plataforma lograba alentar conversaciones desde ambos lados», recuerda.
«Pero desde que Elon Musk tomó el control, todo el entorno cambió completamente. Los contenidos me interesaban mucho menos», resumió Brose.
El director de Tesla compró Twitter en octubre pasado y muchas de sus decisiones disgustaron tanto a usuarios como a anunciantes, desde el despido de casi todo el personal de moderación de contenidos hasta el cambio -a servicio de pago- de la verificación de una cuenta.
Threads fue activada justo después de la última decisión polémica del multimillonario: limitar el número de mensajes que cada usuario puede ver por día.
Como el número dos del mundo de la publicidad en línea, Meta «tiene las herramientas de segmentación de usuarios y de moderación de contenidos» que las marcas quieren, subrayó Enberg.
«Threads representa, por tanto, una alternativa a Twitter, también para los anunciantes», aunque por ahora no hay publicidad en la nueva red.
VALOR AGREGADO
Pero, ¿la última creación del grupo californiano va a acabar con Twitter?
«No», responde categóricamente el inversionista Jeremiah Owyang.
«Twitter sigue siendo dominante», afirmó, en especial gracias a los medios y a los periodistas que son adeptos a esta red desde hace tiempo.
«Threads llega muy tarde», explicó, pues los muchos usuarios que huyeron de la plataforma han adoptado alternativas como Mastodon, una red de comunidades, o Bluesky, una aplicación aún en fase de desarrollo del cofundador de Twitter Jack Dorsey.
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La nueva plataforma sufre también por no estar presente en Europa. Meta retardó su salida en este inmenso mercado por razones legales.
Jeremiah Owyang duda además que Threads se beneficie en el largo plazo de su nacimiento en el seno de Instagram, pues el texto y la imagen no atraen necesariamente al mismo público. «No tengo ganas de ver los mensajes escritos de la gente que sigo en Instagram», dice el experto.
En una entrevista en el pódcast de Hard Fork, Adam Mosseri, director de ambas aplicaciones, dijo que espera que Threads se enfoque «en temas que ya son fuertes en Instagram, como deportes, música, moda, arte».
En cuanto a la actualidad y la política, donde está el éxito de Twitter, «no haremos nada para impulsarlos», afirmó.
En esta etapa es difícil imaginar cómo Threads puede reemplazar a Twitter ni a qué necesidad responde.
«Es la principal pregunta a la que Meta debe responder», dijo Enberg. «¿Cuál es el valor agregado de Threads?»
AFP