La Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica examinaron más de 100 poblaciones de especies de mamíferos marinos estadounidenses y descubrieron que más del 70% de esas poblaciones son vulnerables a amenazas, como la pérdida de hábitat y alimentos, debido a las consecuencias del calentamiento de las aguas. Los impactos también incluyen la pérdida de oxígeno disuelto y cambios en la química del océano.
Los científicos descubrieron que las ballenas grandes, como las jorobadas y las ballenas francas del Atlántico norte, se encontraban entre las más vulnerables al cambio climático, y que otras ballenas dentadas y delfines también corrían un alto riesgo.
El estudio, publicado el mes pasado en la revista PLOS ONE, es evidencia de que la forma en que Estados Unidos maneja las ballenas y los delfines debe adaptarse en la era del cambio climático, dijeron los defensores de los mamíferos marinos.
Le puede interesar – Mueren casi 1.000 aves tras colisionar con un edificio en Chicago
Las noticias son sombrías, pero la evaluación también es la primera que analiza únicamente las poblaciones de mamíferos marinos gestionadas por Estados Unidos y los resultados pueden ayudar a informar a los administradores federales de océanos sobre cómo salvaguardar a los animales vulnerables, dijo Matthew Lettrich, biólogo y autor principal del estudio.
«A medida que el clima cambia, ya estamos viendo algunos de los efectos, y algunas de nuestras poblaciones de mamíferos marinos son más vulnerables a esos cambios que otras», dijo Lettrich. «Según este estudio, vemos que una buena proporción son muy y muy vulnerables».
Los investigadores estudiaron los mamíferos marinos que viven en el océano Atlántico norte occidental, el Golfo de México y el Mar Caribe. Los animales son gestionados por el Servicio Nacional de Pesca Marina, el brazo del gobierno federal responsable de la administración y protección de los recursos marinos.
Los científicos observaron el grado de exposición de los animales al cambio climático y su sensibilidad y capacidad de adaptación al mismo. Descubrieron que el 72% de las poblaciones eran muy o muy vulnerables al cambio climático, y un poco menos de la mitad caía en la categoría «muy alta».
El calentamiento del océano perjudica principalmente a los mamíferos marinos al alterar su capacidad para encontrar alimento y reduce su cantidad de hábitat adecuado, según el estudio.
VOA