Bolivia, uno de los países con las mayores reservas de litio en el mundo, anunció este miércoles un acuerdo por 450 millones de dólares con la estatal rusa Uranium One Group para la explotación de este mineral clave en la transición hacia energías limpias.
El convenio prevé la instalación de una planta piloto para la extracción de litio, principal componente para la fabricación de las baterías para autos eléctricos, en los salares del sur del país, según anunció el gobierno y representantes de la empresa.
La firma rusa, que forma parte de la Corporación Estatal Rusa de Energía Atómica (Rosatom), asumirá el total de la inversión durante los siguientes dos años.
«Este convenio ratifica el modelo de producción y comercialización que planteamos a todas las empresas que quieren trabajar con nuestro litio. Nosotros participamos en todos los puntos de la cadena productiva», señaló el presidente Luis Arce durante la suscripción del acuerdo.
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Bolivia cuenta con una de las mayores reservas certificadas de litio en el mundo, unas 23 millones de toneladas, y se alió con China y Rusia para iniciar su explotación a escala industrial.
Junto a Chile y Argentina, el país conforma el llamado «triángulo del litio», el mayor depósito global del llamado ‘oro blanco’.
Uranium One Group fue seleccionada entre siete postulantes tras la convocatoria lanzada por la estatal Yacimientos de Litio Boliviano (YLB) hace más de un año.
A partir del acuerdo suscrito este miércoles, se comenzará a «procesar carbonato de litio a grado batería (ndlr, destinado a ese fin). La planta piloto producirá mil toneladas» el primer año, precisó Karla Calderón, presidente de YLB, durante el mismo acto.
En una segunda fase «la producción escalará a 8.000 toneladas y en una tercera fase se sumarán 5.000 toneladas más», para un total de 14.000 toneladas anuales, añadió.
Todo el proyecto prevé una inversión de 450 millones de dólares hasta 2025, de acuerdo con el gobierno de Arce.
Bolivia espera que sus exportaciones de litio alcancen el próximo año los 5.000 millones de dólares, por encima de las ventas de gas, hasta hace poco su principal recurso, pero cuya industria atraviesa una profunda crisis por la falta de inversiones en exploración.
AFP