A 11 meses de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, las preocupaciones y cuestionamientos entre los votantes sobre cuáles son las prioridades que deberían tener los candidatos, han comenzado a ser eje de las campañas electorales.
En conversación con la Voz de América, ciudadanos expresaron interés por la manera en que se atenderán desde la Casa Blanca temas como la polarización, la economía y la migración, a partir del 2025 con el próximo período presidencial.
¿Se votará por convicción o por castigar a un candidato?
“Todo sobre la próxima elección me preocupa”, dijo a la VOA Tala Kadi, una joven de 22 años residente en Washington. Kadi cuestionó la “alta polarización” en la que se encuentra el país y las consecuencias que eso llevaría a las urnas.
La joven se preguntó si debido a esto: ¿votarán las personas en base a sus convicciones personales o como sanción contra el candidato que no les gusta?
Dante Chinni, director del Proyecto de Comunidades Estadounidenses en la Universidad Estatal de Michigan, explicó que “es muy común que los estadounidenses digan que votarán por el menor de dos males. Esa es una de las dos reglas permanentes de la política presidencial en particular”.
En un país de 330 millones de personas, abundó Chinni, “la idea de que vamos a alinearnos con todo lo que cree un candidato, simplemente no sucede”. Aún así, las razones por las que acudirán los ciudadanos a las urnas varía.
LEA TAMBIÉN: Senadores de EE.UU. piden sancionar a Cristina Kirchner por «actos de corrupción»
“La mayoría de los votantes recordarán los últimos cuatro años y harán una evaluación de cómo le está yendo al presidente en ejercicio y si están satisfechos con el trabajo votarán por él. Si no están contentos, votarán en contra… eso no es necesariamente un respaldo a un rival, sino un rechazo al titular”, explicó Meena Bose, decana de la escuela de gobierno y políticas públicas de la Universidad Hofstra en Nueva York.
Sin embargo, agregó Bose, sí existen votantes centrados en temas específicos que suelen participar en mayor medida en elecciones primarias, y que harán protagonistas temas como las alianzas políticas y la economía.
Con la primaria republicana en camino, las encuestas mantienen con un amplio margen de preferencia al expresidente Donald Trump. Datos revelados por el Emerson College, una universidad en Boston, Massachusetts, detallan que Trump mantiene un liderazgo de 64 % en preferencia de voto.
“Considerando que es probable que Donald Trump sea el nominado. Algunas personas harán todo lo posible para votar por Donald Trump, y otras harán todo lo posible para votar en contra de Donald Trump… ¿será eso cierto para Joe Biden? Probablemente, pero en menor medida”, agregó Chinni.
Kadi, concluyó que para ella sería “ideal ver una cara nueva… Sólo espero que haya un gran avance. Y una tercera persona, que sea un poco más moderada en ambos frentes, entre y se centre en incentivos sociales”.
“Creo que a lo que se refiere Tala (la joven residente de Washington) es a que en 2024 hay mucho en juego en las elecciones… Los estadounidenses van a lidiar con los antecedentes de los dos candidatos. Pero también creo que una cosa que realmente tendrán en cuenta es quién cuida de personas como ellos”, agregó Colin Seeberger, asesor principal de comunicaciones del Center for American Progress, un centro de investigación en Washington.
¿Se debería enfocar el financiamiento en asuntos sociales o internacionales?
Deneé Benton es una actriz de 31 años, residente en Nueva York, que se mostró preocupada por la capacidad de los estadounidenses de costear vivienda, comida y planes médicos, mientras el país invierte altas sumas de dinero en conflictos internacionales.
“¿Por qué dicen que no hay dinero para cuidado, vivienda o comida? Hay miles de millones de dólares para otras cosas que muchas personas te están pidiendo no hacer… ¿Por qué no usarlos en ayudar a los estadounidenses?”, dijo Benton a la VOA.
Para Bose, “esta es una pregunta sobre política interna versus política exterior, y qué tema qué áreas son más importantes para los votantes. Esto surge en cada temporada electoral”.
Ahora especialmente debido al apoyo que Washington ha provisto a sus aliados en Ucrania para defenderse de Rusia, y en Israel y su guerra contra Hamás.
“Es importante recordar que EE.UU. es el país más rico de la historia del mundo. Tenemos abundantes recursos en este país para satisfacer nuestras necesidades, tanto aquí como en el extranjero”, agregó Seeberger.
Chinni, por su parte, explicó que se trata de una “cuestión de prioridades y de necesidad apremiante”. Al iniciar una guerra, la financiación va dirigida a apoyar a los aliados, lo que es una prioridad inmediata para EE.UU. Mientras, “las preocupaciones de vivienda y atención médica son legítimas, son unas a largo plazo”.
“A veces los votantes estadounidenses piensan que si pudiéramos dejar de gastar todo este dinero en otros países y concentrarlo aquí, solucionaríamos todos nuestros problemas, pero no sería suficiente dinero… Tenemos problemas reales en este país, problemas sistémicos que van mucho más allá”, agregó Chinni.
Un reto adicional en estas elecciones, según los expertos, no será ponerse de acuerdo sobre cuál es el problema, sino “acordar qué hacer con el problema”. Benton, por su parte, dijo querer ver en un candidato “transparencia y honestidad”.
¿Se podría prohibir la entrada de migrantes a EE.UU.?
La crisis migratoria se ha ubicado en el último año como una prioridad de los votantes en EE.UU. La encuesta de Emerson College revela que aunque la economía permanece prioritaria con un 35 % de la opinión popular, la preocupación por la migración alcanzó un 16 % entre los encuestados.
Desde Venezuela, Gánesis Guerra cuestionó cuál podría ser el acercamiento de Trump a la migración en un nuevo mandato, de asegurar la nominación republicana y ganar en la elección general.
“Estamos hablando de dos visiones completamente diferentes”, explicó Seeberger sobre las propuestas de Trump y de Biden en cuanto a políticas migratorias. El actual presidente ha sido vocal en la necesidad de una reforma inmigratoria y se ha mostrado en contra de la construcción de barreras físicas en la frontera. Mientras el expresidente ha insistido en deportaciones masivas y construcción del muro fronterizo.
VOA