En México ya se hicieron los cierres de campaña electoral, lo que resta ahora es que el pueblo defina quién de los tres candidatos sera su nuevo presidente.
Andrés Manuel López Obrador. Es candidato por tercera vez en México, de tendencia izquierdista, lidera las encuestas y cerró su campaña en el Estadio Azteca mostrando una masa de seguidores que ya lo daban triunfador, dice que ha sido un hombre recto y honrado y que quierre transformar a México de forma pacífica, popular y radical: “Y que nadie se asuste con lo de radical, que viene de raíz, se trata de cambiar el actual régimen desde la base”, dijo López Obrador.
Ricardo Anaya. Es militante del Partido Accion Nacional, PAN, apostó por el voto conservador y e invitó a los mexicanos al voto útil, unido y triunfador y se erige como la opción para derrotar a López Obrador. “No hay tiempo para más virajes ni nuevas estrategias”, así finalizó su cierre de campaña en el estado de Guanajuato. Lo apodan “el chico maravilla”, por sus habilidades políticas para negociar y conseguir lo que busca, lo acusan de lavado de dinero, que él ha negado. Pulsó el voto duro mexicano para llegar como candidato y se enfrentó al expresidente Felipe Calderon a lo internoi del partido. “No nos pudieron doblar y no nos podrán doblar nunca (…) el México que soñamos está muy cerca, quiero que lo dejemos todo, que lo dejemos todo por México”.
José Antonio Meade. Prometió combatir la inseguridad en su cierre de campaña. Es economista y lo apoya el PRI, Partido Revolucionario Institucional, dice que impedirá el financiamiento y el armamento de los grupos criminales y lo dijo desde el estado de Coahuila, norte del país, una región seriamente afectada por la lucha entre carteles de la droga y donde los ciudadanos han presenciado algunos de los episodios más violentos en la última década en México. Sus seguidores lo acompañaron desde el Oarque las Maravillas, pero el manto de acusaciones por corrupción de la actual administración de México, encabezada por Enrique Peña Nieto, no lo han ayudado.