El gobierno de Argentina condenó la detención arbitraria de Henry Alviarez y Dignora Hernández, y la emisión de órdenes de detención contra otros dirigentes de Vente Venezuela, por lo que pidió poner fin al hostigamiento contra los opositores políticos en Venezuela.
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«Argentina se sumó al llamado de la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos para que Venezuela ponga fin al hostigamiento contra los opositores políticos, al tiempo que reafirma su compromiso con la defensa de la libertad, la democracia y los derechos humanos y aboga por la celebración de elecciones presidenciales democráticas, transparentes, competitivas, con participación plena de todos los candidatos políticos y con presencia de observación electoral externa», indicó un comunicado de la Cancillería argentina.
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Asimismo, exigió la pronta liberación de los dirigentes detenidos y el cese de las detenciones arbitrarias de representantes de la oposición, las cuales considera que constituyen «acciones contrarias al espíritu democrático» y atentan contra el surgimiento «de nuevos liderazgos políticos».
Por último, advirtió sobre una reactivación sistemática de los patrones de violación de los derechos humanos en Venezuela.