Por solicitud de la Cancillería, el Gobierno ha decidido detener el despliegue de ocho agentes de seguridad que se dirigían hacia Venezuela para resguardar la embajada argentina en Caracas.
El sitio web de Clarín había informado recientemente que en la residencia argentina se encuentran hospedados desde hace una semana seis colaboradores de la líder opositora María Corina Machado, quienes se encuentran en calidad de «huéspedes». Estas personas tienen órdenes de prisión emitidas por la dictadura en Venezuela.
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La Cancillería solicitó a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que detuviera el envío de los efectivos que iban a ser desplegados en dos grupos. Uno consistía en seis agentes y el otro en dos, según explicó la ministra Bullrich el jueves en una conversación con Radio Mitre, reseñó Clarín en su sitio web.
Ahora, según informaron fuentes venezolanas en el exilio, el envío de los Gendarmes (oficiales de seguridad) se encuentra en suspenso por dos razones. Indicaron que a través del vicecanciller Leopoldo Sahores y del secretario de Asuntos Americanos, Mariano Vergara, se está llevando a cabo en secreto una negociación para obtener un salvoconducto para los seis venezolanos que se encuentran en una situación complicada.
Los seis ciudadanos se encuentran en una situación difícil, ya que enfrentan la disyuntiva de no querer perderse el proceso electoral en Venezuela, pero si viajan a Argentina se alejarían de este proceso. Sin embargo, si optan por quedarse en Venezuela, corren el riesgo de ser detenidos e incomunicados, como ha sucedido con otras voces disidentes bajo el régimen actual. Para Argentina, es un desafío tener a estos individuos haciendo política dentro de la Embajada si se pretende dar un enfoque humanitario al asunto.
En esa negociación participan la canciller Diana Mondino, Sahores y Vergara con el régimen de Maduro y con los representantes de María Corina Machado.
Según informó Clarín, es Mondino la que tiene que solicitar a la ministra de seguridad, Patricia Bullrich los gendarmes, que se podrán volver a activar previamente a las elecciones presidenciales que anunció el dictador Nicolás Maduro el 28 de julio.
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Optar por confrontar al chavismo y enviar gendarmes argentinos armados (agentes de seguridad de Argentina) para custodiar la sede es una opción que los diplomáticos prefieren evitar, especialmente cuando se trata de proteger a los ciudadanos venezolanos que se encuentran alojados en la residencia. Actualmente, están bajo el cuidado del encargado de negocios de Argentina, Gabriel Volpi, y su familia en la residencia argentina en Caracas, que está siendo asediada por el régimen, reseñó Clarín en su sitio web.
A mi me ocurrio lo mismo, Pero con la PNB me intentaron prohibir mi trabajo, en ese momento realizaba un pase en vivo para Argentina y me hostigaron hasta que me fui. Primero era un policia y luego vienieron cuatro mas. https://t.co/WauV1MgPcO pic.twitter.com/pUhIMwWjrn
— Beatriz Adrián (@Beadrian) March 28, 2024