La guerra en Gaza comenzó el pasado 7 de octubre de 2023 y hasta este sábado, cuando se cumplen 190 días de incesantes ataques y bombardeos por parte de las fuerzas israelíes, se contabilizan más de 33 mil personas muertas.
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En total, según el Ministerio de Salud de la Franja de Gaza, 33.686 personas han muerto y otras 76.309 han resultado heridas.
Solo en las últimas 24 horas murieron 52 personas, según un comunicado del Ministerio, pero además de muerte y destrucción, la guerra también ha provocado una crisis humanitaria sin precedentes con un millón de personas al borde de la hambruna en Gaza, y los niños son los principales afectados.
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La organización Human Rights Watch (HRW) ha denunciado que los niños en Gaza se están muriendo debido a complicaciones relacionadas con el hambre desde que el gobierno de Israel comenzó a «utilizar el hambre como arma de guerra», lo cual constituye un crimen de guerra.
«Personal médico y familias en Gaza han descrito cómo niños, niñas y madres embarazadas y lactantes, padecen severa desnutrición y deshidratación, en hospitales poco equipados para su atención», apuntó HRW.
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“El uso del hambre como arma de guerra por parte de Israel está siendo fatal para los niños y niñas en Gaza”, dijo Omar Shakir, director de la división de Israel y Palestina de Human Rights Watch. “Es imperativo que Israel cese este crimen de guerra, acabe con este sufrimiento y permita el acceso sin restricciones a la ayuda humanitaria en toda Gaza”, manifestó.
Raquel Martí, directora ejecutiva de Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) España, en una entrevista concedida a BíoBíoChile afirmó que 14.500 niños han sido asesinados desde el 7 de octubre en Gaza.
También dijo que hay unos 17.000 niños que se encuentran solos, porque han asesinado a sus familias o porque se encuentran separados de ellas tras huir de los bombardeos.