El dictador Nicolás Maduro aseguró que es devoto de la Virgen del Rosario de Chiquinquirá, más conocida como la Chinita, porque ella supuestamente le salvó la vida en un atentado con drones, según él, orquestado por la oposición.
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«Soy devoto de la Chinita. Sé que fue la Chinita la que salvó mi vida, aquella vez que Julio Borges y la derecha fascista trató de matarme el 4 de agosto de 2018 con el ataque de explosivos con drones», comentó desde Maracaibo, estado Zulia.
Según Maduro, la Chinita puso su mano y dijo: «No, este hombre tiene que cumplir una misión en la patria y no es su hora», y triunfó la vida de manera milagrosa sobre el atentado, la conspiración y la muerte», añadió el dictador.
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Asimismo, aseguró que la «derecha extremista y que sigue a sus amos del norte» es muy mala haciendo oposición y son peores cuando ganan elecciones porque son malos gobernantes.