El embajador de Estados Unidos (EE.UU.) en México, Ken Salazar, negó que Washington haya estado detrás de la operación para detener a Ismael “El Mayo” Zambada y Joaquín Guzmán López, presuntos líderes del Cártel de Sinaloa.
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A través de un comunicado, Salazar detalló que Guzmán López, hijo del «Chapo» Guzmán se entregó “voluntariamente” y Zambada fue arrestado “contra su voluntad” en Santa Teresa, Nuevo México.
«No se utilizaron recursos estadounidenses en la rendición. No fue nuestro avión, ni nuestro piloto, ni nuestra gente. No se presentó ningún plan de vuelo ante las autoridades estadounidenses. Estamos en el entendido que el vuelo inició en Sinaloa y aterrizó en Santa Teresa, Nuevo México. El piloto no era un empleado ni fue contratado por el Gobierno de los Estados Unidos, ni algún ciudadano estadounidense», afirmó el embajador estadounidense.
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A su parecer, el hecho de que Ismael “El Mayo” Zambada” y Joaquín Guzmán López se encuentren bajo custodia representa un «duro golpe» para frenar el tráfico de drogas sintéticas, tales como el fentanilo y sus precursores.
«Esto representa una victoria grande para ambos países. Es el resultado de un trabajo muy definido y basado en los principios del respeto a nuestras soberanías y que hacemos este trabajo como socios», dijo.
Estos arrestos se suman a otros, tales como los de Rafael Caro Quintero, Ovidio “El Ratón” Guzmán y Néstor Isidro Pérez “El Nini” y de otros más.
Mi declaración acerca de los hallazgos sobre la custodia de Ismael Zambada García “El Mayo” y Joaquín Guzmán López #SeguridadCompartida
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— Embajador Ken Salazar (@USAmbMex) August 9, 2024