Raúl Morodo, exembajador de España en Venezuela, ha admitido junto con su hijo Alejo la comisión de delitos de fraude fiscal entre 2013 y 2017, según ha sabido en el juicio iniciado este lunes en la Audiencia Nacional.
Ambos evitarán ingresar en prisión tras aceptar su culpabilidad ante el tribunal. El juez Alfonso Guevara, presidente del tribunal, le preguntó a Morodo si se declaraba culpable, a lo que este respondió afirmativamente.
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Carrera diplomática
Morodo fue embajador de España en Caracas entre 2004 y 2007, bajo el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Fue designado por recomendación del ministro de Defensa, José Bono, ya que no formaba parte del cuerpo diplomático, sino que fue un nombramiento político.
Una parte significativa de los vínculos de Morodo en Venezuela se forjó durante su relación con el gobierno de Hugo Chávez, quien lo consideraba un amigo cercano. Según investigaciones judiciales, tanto Raúl como su hijo Alejo Morodo estuvieron implicados en una trama que, a través de una estructura ‘offshore’, permitió desviar fondos de la petrolera estatal venezolana PDVSA.
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Desde 2007 hasta al menos 2013, Alejo Morodo visitó Venezuela recurrentemente, y durante este período, junto con otros cómplices, habría creado empresas fantasma para cobrar grandes sumas por servicios ficticios de asesoría. La cantidad defraudada asciende a 4,5 millones de euros, gran parte de los cuales fue blanqueada en España mediante la adquisición de propiedades inmobiliarias.
Relaciones cercanas con figuras clave
Entre los involucrados en esta operación se encuentra Rafael Ramírez, quien fue ministro del Poder Popular de Petróleo y presidente de PDVSA entre 2004 y 2013. Ramírez, una figura clave en la economía del chavismo, firmó muchos de los pagos recibidos por los Morodo. Actualmente, se enfrenta a investigaciones por haber sustraído hasta 11.000 millones de dólares de la petrolera venezolana y reside en Italia bajo protección policial.
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Morodo, durante sus visitas a Venezuela, había desarrollado relaciones cercanas con figuras clave del país, incluyendo a los expresidentes Rómulo Betancourt y Carlos Andrés Pérez.
Su vínculo con Chávez era tan estrecho que este último solía mencionarlo en sus discursos. En el programa ‘Aló Presidente’ de abril de 2007, Chávez elogió públicamente a Morodo, refiriéndose a él como «un gran amigo, socialista, escritor e intelectual». En otro discurso en 2006, durante la inauguración de un tramo del metro de Caracas, Chávez agradeció al embajador por su apoyo en el Día de la Hispanidad, asociando su figura con la España que él admiraba.
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Según el periodista venezolano Nelson Bocaranda, Morodo era uno de los pocos diplomáticos con acceso telefónico directo a Chávez, lo que subraya la cercanía entre ambos.
Fuente: El Confidencial