El portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, aseguró que Estados Unidos (EE.UU.) apoya una transición pacífica del poder a un gobierno sirio representativo.
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«Estados Unidos apoya una transición pacífica del poder a un gobierno sirio representativo y responsable a través de un proceso inclusivo dirigido por el pueblo de Siria, en el espíritu de la Resolución 2254 del Consejo de Seguridad de la ONU. Durante este período de transición, el pueblo sirio merece el respeto de sus derechos humanos y libertades fundamentales, la reanudación de los servicios esenciales y la protección y participación de las poblaciones marginadas, incluidos los miembros de los grupos minoritarios», expresó Miller en una rueda de prensa.
A su parecer, la negativa del régimen de Assad desde 2011 a participar en un proceso político creíble, así como su dependencia del apoyo de socios desagradables como Rusia, Irán y grupos como Hezbolá para su brutal represión, lo que condujo inevitablemente a su propio colapso. «Hoy es fundamental que sea el pueblo sirio el que defina el camino a seguir para su país», resaltó.
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El funcionario aseveró que EE.UU. está comprometido a trabajar con el pueblo sirio en la definición de ese camino hacia un futuro mejor.
También dijo que su país seguirá apoyando a los vecinos de Siria -incluidos Jordania, Líbano, Irak e Israel- en caso de que surjan amenazas desde dentro de Siria durante este período de transición, y dejó claro que no permitirán que ISIS utilice este momento para reagruparse y relanzar ataques terroristas que amenazan los intereses de EE.UU.