El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) respondió este miércoles al régimen de Nicolás Maduro, luego de que este calificara como un “secuestro” la decisión de mantener en territorio estadounidense a una niña de dos años, separada de sus padres tras un proceso de deportación.
A través de un comunicado, las autoridades estadounidenses afirmaron que los padres de la menor, Maikelys Antonella Espinoza Bernal, son integrantes del grupo criminal Tren de Aragua.
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Según la información oficial, el padre, Maiker Espinoza-Escalona, sería un “teniente” dentro de la organización criminal, encargado de coordinar actividades como homicidios, tráfico de drogas, secuestros, extorsión, explotación sexual y la operación de una casa de tortura.
La madre, Yorely Escarleth Bernal Inciarte, fue señalada por su presunta participación en el reclutamiento de mujeres jóvenes para actividades de contrabando de drogas y prostitución.
Ambos fueron deportados tras haber recibido órdenes judiciales definitivas de expulsión. Espinoza-Escalona fue enviado a El Salvador, mientras que Bernal Inciarte fue deportada a Venezuela, según reportes de prensa.
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El DHS informó que, en conjunto con el Departamento de Salud y Servicios Humanos, la menor fue retirada del vuelo de deportación “por su seguridad y bienestar”.
La niña permanece bajo el cuidado de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados y se encuentra actualmente en proceso de ubicación con una familia de acogida.