El presidente Donald Trump promulgó este viernes una partida de gastos por 8.300 millones de dólares para combatir el brote de coronavirus.
El plan trata de proyectar confianza y calma al tiempo que aumenta la ansiedad sobre el impacto del COVID-19, que ha cobrado 12 vidas en Estados Unidos y ha infectado a más de 200 personas.
La legislación proporcionará dinero a las agencias federales de salud pública para vacunas, análisis clínicos y posibles tratamientos.
Tras la firma, Trump tenía planes de viajar a la sede de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades en Atlanta, (CDC por sus siglas en inglés), pero lo canceló diciendo que no quería «interferir» mientras la agencia se apresura a trabajar por contener el coronavirus que ha infectado a más de 100,000 personas en todo el mundo.
«Los CDC han sido proactivos y (están) preparados desde el principio y el Presidente no quiere interferir con la misión de los CDC de proteger la salud y el bienestar de su gente y la agencia», dijo un funcionario de la Casa Blanca, explicando la decisión de suspender el viaje.
Con información de la Voz de América