La sombra de la corrupción y la extorsión sigue al acecho en el estado Bolívar.
En la localidad de El Callao, sus habitantes están de luto por el asesinato, a sangre fría, del cultor popular Carlos Clark a quien le dispararon este viernes.
Clark habria reclamado la invasión de una mina de su propiedad días atrás, y logró desalojar a los irregulares con la ayuda de funcionarios de la Guardia Nacional.
Según habitantes del municipio minero, Clark se negaba a pagar una vacuna a quienes controlan de manera irregular las zonas mineras lo que habría sido la principal causa de su vil asesinato.
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