A medida que la crisis de salud de Covid-19 se dirige hacia una nueva y probable fase final, los gobiernos de todo el mundo enfrentan el desafío de reabrir sus fronteras e impulsar sus economías, después de la devastación provocada por la pandemia.
El Covid19 sigue golpeando con más fuerza a los más vulnerables, particularmente a las millones de personas que están en movimiento, como refugiados y desplazados internos, que se ven obligadas a huir de sus hogares producto de la violencia o los desastres, o de las personas migrantes que se encuentran en situaciones precarias.
Demetrios G. Papademetriou, Presidente del Migration Policy Institute, recuerda que recientemente “el Secretario General de Naciones Unidas, Antonio Guterres, dijo que si no operamos y prestamos atención a las necesidades de la gente en los países menos desarrollados, este virus va a tener un efecto Boomerang, pues va a volver a nosotros cuando vuelva a tener lugar la movilidad social con la migración”.
Algunos analistas, como Vicente Calderón, editor de Tijuanapress.com, estiman que una de las primeras crisis que el presidente electo de Estados Unidos Joe Biden tendrá que enfrentar es la relativa a la gran cantidad de gente que va a querer ingresar al país. “Hemos visto un incremento de gente que está queriendo volver a Estados Unidos, mayormente migración desde México o Centroamérica hacia la frontera, pero ahora está muy limitado, son muy pocos, pero si pensamos que una combinación de temas sumado a la difícil situación económica por la pandemia, mucha gente va a querer salir de sus países. Además, debemos tomar en cuenta que acabamos de ver el impacto de dos fuertes huracanes, haciendo que las condiciones sean aún peor”.