Casi una semana después del naufragio ocurrido frente a las costas de Güiria, al oriente de Venezuela, la dictadura de Nicolás Maduro confirmó que son 23 los venezolanos que perdieron la vida en el acontecimiento.
El dato fue precisado, este miércoles, a través de un comunicado emitido por el Ministerio de Interior y Justicia de la tiranía. “La suma de víctimas por este hecho asciende a 23 fallecidos y, hasta ahora, se ha logrado la identificación de 21 cadáveres”, indica el documento.
El texto, refrendado por la ministra Carmen Teresa Meléndez, añade que dos ciudadanos han sido detenidos, por su aparente vinculación con el incidente. Se trata del dueño de la embarcación naufragada y del propietario de la hacienda desde la que habría zarpado el bote.
En el comunicado, el régimen madurista arremete contra los medios y los periodistas que denunciaron el suceso. De hecho, se les califica como “voceros del extremismo venezolano” y se les señala de ser “cómplices de una estrategia de guerra contra el pueblo venezolano basada en el terrorismo sicológico y la manipulación de la realidad”.