Esta es la percepción de la internacionalista Beatriz De Majo sobre la presencia de bombarderos rusos en territorio venezolano, lo que además aclaró sucede desde hace mucho tiempo como una cooperación disfrazada.
Para De Majo, esto podría representar una provocación para los gobiernos de Colombia y de Estados Unidos, porque los rusos estarían metiéndole «el dedo en el ojo» apoyados por el régimen venezolano.