El empresario Lázaro Báez fue condenado este miércoles a 12 años de prisión por la maniobra del lavado de dinero de casi 55 millones de dólares que se conoce como “la ruta del dinero K”.
La Fiscalía había pedido una condena de 12 años de cárcel y una multa de $2.121 millones para el empresario; sin embargo, con el cambio de gobierno las querellas que representan al Ejecutivo, también habían solicitado penas muy altas de hasta ocho y nueve años.
Su hijo mayor, Martín, también fue condenado
Cabe acotar que, luego de casi dos años y medio de juicio, el Tribunal Oral Federal 4, integrado por los jueces Néstor Costable, Gabriel López Iñíguez y Adriana Palliotti.
La investigación de la ruta de dinero K comenzó en abril de 2013; por ese entonces a cargo del juez Sebastián Casanello y del fiscal Guillermo Marijuán, a partir de un informe del programa Periodismo para Todos (PPT) y apuntó a la red de cuentas bancarias abiertas en el exterior y la maniobra, mediante la compra de bonos, para reingresar el dinero a la Argentina, justo cuando Báez necesitaba capitalizar su empresa para poder quedarse con la construcción de dos represas en Santa Cruz.
Se trata de una causa con implicancias políticas por la cercanía del empresario con la familia Kirchner.