La Asamblea Legislativa (Congreso) de El Salvador, en la mira de la comunidad internacional por destituir de forma exprés a magistrados, reformó este miércoles una ley que perdonaba algunos impuestos a los periódicos, la mayoría de ellos críticos del presidente Nayib Bukele.
El diputado Christian Guevara propuso la iniciativa para modificar la antigua Ley de Imprenta, que «ha impedido que los periódicos paguen impuestos por más de 70 años», aseguró.
«Vamos a terminar hoy la más larga, continuada y descarada evasión fiscal de nuestra historia», dijo el parlamentario oficialista, cuya alianza cuenta con 61 de los 84 escaños en la Asamblea Legislativa. La norma se aprobó con 68 votos.
«Las imprentas no estarán sujetas a ningún impuesto ni caución», consignaba el artículo 8 de la ley de 1950, con la cual se beneficiaba la elaboración de periódicos, revistas, folletos y libros vinculados a la «libre difusión del pensamiento».
Esa norma les permitía importar sin impuestos el papel y la tinta. También la venta diaria de los rotativos en la calle estaba libre de tributos.
Ahora la nueva norma establece que las imprentas de diarios «no gozarán de excepción arancelaria para la importación de materias primas, maquinaria y equipo para la impresión de materiales o publicaciones que no se destinen directamente a propósitos educativos».
«No gozarán de deducción de impuestos sobre la renta o de ingresos provenientes de esta fuente», agrega.
El Parlamento de El Salvador fue blanco de críticas internacionales después de que el sábado, tras su instalación, destituyera a los magistrados de la Sala Constitucional de la Corte Suprema, acusándolos de adoptar sentencias arbitrarias, y al fiscal general, Raúl Melara, por sus vínculos con un partido de oposición.
El martes, el gobierno salvadoreño difundió la grabación de una reunión de Bukele con el cuerpo diplomático acreditado en El Salvador, donde el mandatario les reprochaba las condenas internacionales a su gobierno.
Bukele les detalló que las destituciones son de acuerdo a ley y tienen el respaldo popular. El representante de Estados Unidos, Brendan O’Brien, no estuvo presente en la cita, mientras que el embajador de la Unión Europea, Andreu Bassols, le dijo que las medidas del Parlamento «socavan el estado de derecho y la separación de poderes en El Salvador».
El martes, la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, consideró que su país «debe responder» ante la destitución de magistrados en El Salvador y que la independencia del poder judicial es «crítica» para la salud de una democracia.