Nueve personas murieron este lunes en un ataque armado en una zona rural del municipio de Algeciras, en el suroeste de Colombia, informó la Defensoría del Pueblo.
Hombres armados irrumpieron en una vivienda rural y «acabaron con la vida de ocho hombres y una mujer», agregó en Twitter la institución que vela por los derechos humanos, sin referirse a los motivos o responsables de la agresión.
Según la ONG Indepaz, se trató de una masacre ocurrida en una finca que ya había sido atacada en el último año.
La organización independiente aseguró que con esta acción se elevan a 41 las matanzas – homicidios de tres o más personas en el mismo hecho- en lo que va del año.
En el mismo sitio murieron el año pasado siete personas, entre ellas dos menores de edad, en ataques similares al reportado este lunes.
Disidentes del acuerdo de paz firmado por la guerrilla FARC en 2016, bandas de narcotraficantes y guerilleros del ELN se disputan las rentas del narcotráfico en el suroeste de Colombia.
La región también ha sido alcanzada por el estallido social que sacude al país desde hace un mes y que deja al menos 59 muertos.
Además de las masivas marchas protagonizadas por jóvenes que protestan contra los abusos policiales y reclaman un Estado más solidario ante los estragos económicos de la pandemia, el país vive un grave repunte de la violencia en las zonas rurales.
El presidente conservador, Iván Duque, responsabiliza a grupos que se financian del narcotráfico y la minería ilegal.
Con información de AFP