Al menos 12 personas murieron y 149 siguen desaparecidas tras el derrumbe parcial de un edificio cerca de Miami, a donde el presidente estadounidense, Joe Biden, acudirá esta semana, según anunció el martes.
La Casa Blanca dijo que el presidente recorrerá el lugar de la catástrofe el jueves con la primera dama, Jill Biden, para asegurarse de que los funcionarios estatales y locales tienen todo lo que necesitan para sus tareas.
«Quieren agradecer a los heroicos socorristas, a los equipos de búsqueda y rescate y a todos los que han estado trabajando incansablemente las 24 horas del día», dijo la secretaria de prensa, Jen Psaki.
La alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, confirmó por la tarde el nuevo balance de víctimas en el derrumbe parcial del complejo Champlain Towers South, en Surfside, al norte de Miami Beach.
Los residentes de la parte del edificio que siguió en pie informaron haberse despertado sobre la 01H30 del 24 de junio (05H30 GMT) con un ruido parecido a truenos que sacudió sus habitaciones.
Los equipos de rescate que llegaron momentos después de la caída de la torre de 55 apartamentos ayudaron a evacuar a decenas de residentes y sacaron vivo a un adolescente de entre los escombros.
Pero desde entonces, las autoridades se han enfrentado a la creciente frustración de familiares y amigos de los residentes que aún se temen atrapados debajo de una enorme pila de hormigón y hierros retorcidos.
– Búsqueda «minuciosa y agotadora» –
Se están utilizando dos grandes grúas para retirar cuidadosamente los escombros. Los bomberos, que trabajan sin descanso bajo el calor y la humedad, se están ayudando de la tecnología de búsqueda por imagen y sonido para localizar bolsas de aire en las que aún pueda haber personas con vida, aunque la esperanza se desvanece a medida que pasan los días.
Ya se han excavado más de 1.300 toneladas de hormigón, según las autoridades.
Dos venezolanos fueron identificados entre los fallecidos y hay otros 29 latinoamericanos vinculados al inmueble de los que todavía no se tienen noticias: nueve de Argentina, seis de Colombia, seis de Paraguay, cuatro de Venezuela, tres de Uruguay y uno de Chile.
«Esta tragedia en Miami la sentimos propia por ser el principal asentamiento de venezolanos en Estados Unidos», dijo Carlos Vecchio, representante diplomático del opositor venezolano Juan Guaidó, considerado presidente interino de Venezuela por Estados Unidos.
«¡No perdamos la esperanza!», pidió Vecchio tras visitar el martes el lugar.
– Investigación exhaustiva –
Las autoridades locales prometieron una investigación «exhaustiva» sobre las causas de lo sucedido.
Según una carta divulgada este martes por medios estadounidenses, la presidenta de la asociación de copropietarios del complejo Champlain Towers South, Jean Wodnicki, advirtió hace dos meses a los residentes que su edificio sufría un «deterioro» creciente.
En la misiva, fechada el 9 de abril, estimó que era necesario invertir unos 15 millones de dólares para evaluaciones necesarias para solucionar problemas estructurales.
Desde 2018, «el deterioro del hormigón se ha acelerado, el estado del techo ha empeorado considerablemente», alertó Wodnicki.
Ese año, un informe sobre la lujosa construcción había señalado ya «daños estructurales importantes», así como «grietas» en el sótano del edificio, según documentos publicados por el gobierno de Surfside.
«La impermeabilización debajo de los bordes de la piscina y la vía de acceso para vehículos (…) ya superó su vida útil y por lo tanto debe ser retirada y reemplazada por completo», escribió en este documento el experto Frank Morabito, pidiendo reparaciones «dentro de un tiempo razonable», aunque sin señalar abiertamente un riesgo de colapso.
«No vi nada que me dijera que era mejor salir de aquí si estaba en ese edificio», dijo el ingeniero Allyn Kilsheimer, que fue enviado por la ciudad de Surfside para aclarar las condiciones de la tragedia.
«Nunca hay nada perfecto en el diseño» de un edificio, juzgó el experto, que ya trabajó tras el ataque al Pentágono durante los atentados del 11-S o el mortal terremoto de Ciudad de México en 1985. «Es posible que haya entrado en juego una combinación de factores».
La investigación sobre la causa exacta de la tragedia llevará probablemente meses.