Decenas de publicaciones compartidas en Facebook desde el 19 de julio pasado señalan que la proclamación de Pedro Castillo como presidente de Perú es ilegal, días antes de que se le entregue el mando. Sin embargo, el triunfo del abanderado de Perú Libre fue anunciado tras seis semanas de revisión de actas mediante un procedimiento legal y se acoge a la Constitución.
“Castillo presidente de facto, carece de legitimidad jurídica, su proclamación es ilegal”, se lee en una imagen compartida cientos de veces en Facebook (1, 2, 3).
“¿Un ciudadano proclamado presidente de forma ilegal y fraudulento te representa?”, escribieron otros usuarios junto a una imagen que dice “Pedro Castillo no me representa” (1, 2).
En Twitter también se encontraron mensajes mencionando una presunta ilegalidad en la elección de Castillo o que éste sería un presidente de facto (1, 2, 3).
“De facto” e “ilegal”
De acuerdo al Diccionario panhispánico de dudas de la Real Academia Española, “de facto” significa “literalmente ‘de hecho’, esto es, ‘sin reconocimiento jurídico, por la sola fuerza de los hechos’”.
AFP Factual consultó con el abogado constitucionalista William Oblitas, quien explicó: “Conceptualmente en la teoría general del Estado, el presidente de facto es un presidente no constitucional, que ha asumido su rol por una vía que no va acorde a la Constitución ni las normas, que no goza de ningún respaldo legal”. Lo anterior, aseguró, no es el caso de Pedro Castillo, ya que en Perú “hubo elecciones”.
El experto electoral Fernando Tuesta consideró por su parte: “Quienes critican el proceso electoral llamado fraude, cosa que nadie ha podido demostrar, son los que justamente han desarrollado un gran operativo para desprestigiar las elecciones” en Perú.
Las acusaciones de fraude en torno al triunfo de Castillo se remontan a la segunda vuelta electoral, el 6 de junio pasado. Dos días después, Keiko Fujimori (su contrincante de Fuerza Popular) alegó que hubo una gran cantidad de actas impugnadas a favor de Perú Libre e indicó que hubo indicios de fraude electoral.
Fuerza Popular solicitó la nulidad de 802 mesas a nivel nacional ante el Jurado Nacional Electoral (JNE).
El 19 de julio pasado, tras seis semanas de revisión, el JNE anunció los resultados finales de la segunda vuelta presidencial dando como ganador a Castillo. En la resolución legal oficial no se mencionan irregularidades ni actos ilegales.
De hecho, el texto detalla lo siguiente: “Fueron resueltas en su totalidad las observaciones a las actas electorales, las impugnaciones de voto y las solicitudes de nulidad. (…) Los sesenta Jurados Electorales Especiales proclamaron los resultados descentralizados correspondientes a sus respectivos ámbitos de competencia territorial, emitiendo las sesenta actas de proclamación descentralizada, de las cuales, fueron impugnadas las de los Jurados Electorales Especiales de Huancavelica, Cajamarca, Chota, Huamanga y San Román, las que fueron resueltas en segunda y definitiva instancia por el Jurado Nacional de Elecciones”.
Luego la resolución detalla cómo quedó la cantidad de votos por cada candidato tras las revisiones mencionadas:
El artículo 111 de la Constitución Política de Perú detalla el mecanismo de elección del presidente de la República: si ninguno de los candidatos obtiene la mayoría absoluta se procede a votar en una segunda vuelta, tal como ocurrió entre Pedro Castillo y Keiko Fujimori.
Luego del balotaje, las misiones observadoras externas como las de la Organización de los Estados Americanos (OEA), la Unión Interamericana de Organismos Electorales (Uniore) y la organización civil Transparencia Perú, reportaron incidentes aislados pero ninguno mencionó actos ilegales.
De hecho, tras la proclamación oficial del JNE, la OEA felicitó la publicación de los resultados: “La Misión observó las distintas fases del proceso electoral peruano (…), ha seguido con atención la etapa postelectoral, en la que las fuerzas políticas presentaron diversas apelaciones, que fueron analizadas y resueltas por la justicia electoral. Estas no modificaron el resultado final de la elección”.
Transparencia Perú también saludó el anuncio de los resultados.
En tanto, el mismo día en que se proclamó el triunfo de Castillo, Fujimori declaró ante los medios de comunicación que reconocería los resultados: “Es lo que manda la ley y la Constitución que he jurado defender”, dijo.
La ceremonia del traspaso de mando está prevista el 28 de julio de 2021, cuando Perú conmemora el bicentenario de su Independencia de España.