Alemania exigirá a partir del 1 de agosto un test negativo a todos los viajeros mayores de 12 años de edad que no hayan recibido la pauta completa o superado la enfermedad, independientemente de su vía de acceso al país.
En caso de proceder de una de las regiones bajo dominio de las variantes más agresivas del covid-19, la obligación del test se amplía a todos los viajeros, según la resolución adoptada este viernes por el gobierno federal.
El propósito del gobierno, indicó su viceportavoz, Ulrike Demmer, es optimizar el control sobre los viajeros que ingresan en el país y contener la extensión del coronavirus.
Junto a las nuevas normas de ingreso, se simplificarán las categorías de los lugares de procedencia considerados de riesgos, que se reducirán a dos: de alto riesgo, por un lado, y bajo dominio de las variantes más agresivas, por el otro.
En la primera categoría, la de alto riego, entraron hace unas semanas socios europeos como España y Países Bajos. Los viajeros no inmunizados procedentes de estas zonas quedan en cuarentena por diez días, que pueden reducirse a cinco si al quinto se presenta un test negativo.
Para los de máximo riesgo o dominio de variantes, como Brasil, las restricciones son más severas, ya que solo se permite el ingreso en el país a viajeros alemanes o residentes en Alemania, que además deben guardar cuarentena por 10 días.