Después de burlar a la DEA y a la policía española por dos años, ocultándose en las entrañas de Madrid (España), Hugo «el Pollo» Carvajal, el exjefe de contrainteligencia del gobierno venezolano, está ejecutando todo tipo de estrategias legales y políticas para frenar su extradición a Estados Unidos, tras su captura el 9 de septiembre.
Desde la cárcel de Estremera empezó a ofrecer datos sobre la ETA, las FARC y otra información relevante, con tal de no ser enviado a Nueva York, en donde se le procesa por el tráfico de 5,6 toneladas de cocaína.
Audrey Strauss, fiscal del Distrito Sur de Nueva York, asegura que además de narcotráfico, Carvajal debe responder por el uso y porte de ametralladoras y dispositivos destructivos en apoyo a conspiraciones de narcoterrorismo.
Además de testimonios, movimientos bancarios e interceptaciones, El Tiempo estableció que Estados Unidos tiene en su poder 34 correos que probarían el rol que Carvajal cumplió como enlace entre el gobierno de Maduro y la guerrilla de las FARC. En los mensajes no solo queda explícita la protección que Venezuela les ha venido brindando sino, además, el suministro de un poderoso arsenal.
Los PC de «Reyes»
“Carvajal es el custodio de los secretos de inteligencia del régimen. Hugo Chávez lo designó para ponerla al servicio del ‘cartel de los Soles’, de la mafia (colombiana y mexicana), de las FARC y del ELN, y para asociarse con fines de financiamiento ilegal a lo largo de la frontera con Colombia”, aseguró el general (r.) de la Policía Juan Carlos Buitrago, quien conoce de cerca ese expediente.
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Los correos que tiene Estados Unidos se encontraron en los computadores del extinto jefe guerrillero Raúl Reyes, tras la operación Fénix, ejecutada por la Policía, el Ejército y la Fuerza Aérea, en 2008, con bombardeo incluido.
Reyes intercambió mensajes con Iván Márquez, actual jefe de las disidencias Segunda Marquetalia, sobre contactos y reuniones con Carvajal. Los mensajes se enviaron entre 2004 y 2008.
“(…) Me permito sugerir a Ricardo concertar nueva entrevista con el general Carvajal, con la finalidad de expresarle nuestros agradecimientos al presidente Chávez y a él, por aceptarla visita a su país del camarada Iván en representación del Secretariado”, escribió Reyes en octubre de 2004.
«Los amigos cubanos»
Alias Ricardo agregó que Carvajal aspiraba a manejar las relaciones con las FARC.
También se refirió a que un alto diplomático en La Habana había alertado a Chávez sobre el peligro de que se filtrara la información de la presencia de las FARC en Venezuela.
Sin embargo, el guerrillero aseguró que Carvajal estaba alineado con “los amigos cubanos”.
En otro de los correos, Reyes pide que se le envíe a Carvajal la información sobre el tráfico de cocaína que los paramilitares venían haciendo para que tomaran medidas: “Recibí información muy importante y concreta sobre los cruces de Mancuso y sus lugartenientes paramilitares y narcotraficantes que salen y entran por Maracaibo con sus toneladas de cocaína. Esta información la mandé a mi compadre, con la recomendación de darla a conocer a la comisión que lo visitará próximamente en cabeza del general Carvajal. Usted contribuya en esto, es rentable políticamente a las dos partes”.
Clíver y el arsenal
En enero de 2007, el propio Iván Márquez le notificó a Reyes una nueva reunión con el Pollo y con otro general del chavismo: “Como estaba previsto, el 3 de enero me reuní con los generales Alcalá y Carvajal (con el cual ya me había reunido en tres ocasiones). Hablamos del Plan Patriota, canje, la ‘parapolítica’ y aspectos del plan estratégico: finanzas, armas y política de fronteras”.
Clíver Alcalá ya está preso en Estados Unidos, listo para firmar un acuerdo de culpabilidad que también tiene nervioso a Carvajal.
En otro correo, Márquez señaló que “Carvajal quedó con el compromiso de traer un ofertante de armas de Panamá”. “Entretanto nos van a hacer llegar la próxima semana 20 bazucas no recuerdo el calibre de gran potencia, según ellos, de las cuales 10 serían para Timo (Timochenko) y 10 para acá. Alcalá sugirió que fuera una cantidad mayor”.
A esas armas se refiere el fiscal de Nueva York y a eso es lo que le teme el Pollo. Por eso ya había mandado señales para negociar
“En 2018, a través de Colombia, les envió un mensaje a las autoridades americanas expresando su interés de colaborar con la justicia de ambos países. Exigía como requisito que le fueran anulados los «indictments». Frente a la imposibilidad jurídica de aceptar su petición, decidió huir a España”, explicó el general (r.) Buitrago.
Pero esta vez la DEA no está dispuesta a negociar con el Carvajal y espera que España termine entregándolo en los próximos días.
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