La campaña electoral en Venezuela culminó este jueves. Cerca de 70.000 candidatos realizaron concentraciones, transmitieron sus mensajes y buscaron captar la intención de voto de los electores de su localidad, de cara a unas votaciones que definirán 3.082 cargos en toda Venezuela.
Este domingo, estarán en juego 23 gobernaciones, 335 alcaldías, 2.471 concejalías y 253 diputaciones de los consejos legislativos regionales.
Estos son los hitos más destacados de la campaña, marcada por el retorno de la oposición tras cuatro años de ausencia:
1. El regreso de la “manito”
El poder electoral venezolano rehabilitó en junio pasado la tarjeta de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) bautizada popularmente como “la manito” de la oposición. Los detractores de Maduro alcanzaron con ella su mayor triunfo electoral en 2015, cuando ganaron dos tercios del Parlamento agrupados en una sola coalición. Los partidos políticos celebraron la decisión unánimemente.
El Tribunal Supremo de Justicia —afín a Maduro— ilegalizó esa tarjeta en 2018, al argumentar que los partidos que la integraban ya estaban conformados como organizaciones políticas renovadas y provocaba una “doble militancia”.
2. «Decoloración» oficialista
La iconografía de los candidatos del Partido Socialista Unido de Venezuela no estuvo caracterizada por el típico color rojo que identificó al chavismo desde su origen, a finales del siglo pasado. Otros colores, como el violeta y el azul, se incorporaron a la imagen de los abanderados del gobierno de Maduro.
“Estamos viendo una estrategia de campaña donde el rojo se pierde. Se diluye entre verdes, morados, amarillos. Hay una nueva tonalidad de presentación del chavismo en un ejercicio de lavarse la cara”, apuntó este jueves durante un foro el politólogo y director del Movimiento de Democracia e Inclusión, Nicmer Evans.
Es, a su entender, un reconocimiento de que “esa visión radical, extremista, pintada de rojo, ya no genera ningún tipo de impacto en relación con la posibilidad de persuasión o ejercicio de control del voto” del oficialismo.
Esa «decoloración» comentada por analistas y consultores políticos coincidió con discursos llenos de promesas para remediar las fallas de los servicios públicos y las carencias de las diferentes ciudades, poblados y estados.
3. Ventajismo oficialista
La campaña en Venezuela estuvo adelantada de facto desde agosto, dos meses antes de su inicio formal, y para la misma se usaron recursos e instituciones públicos, de acuerdo con reportes de la Red de Observación Electoral de la Asamblea de Educación y la coalición de medios Guachimán Electoral.
La Red informó que 19 de los 23 candidatos a gobernaciones del Partido Socialista Unido de Venezuela adelantaron su campaña mediante la entrega de medicamentos, sillas de ruedas, camas clínicas y alimentos, y realizaron jornadas de salud y obras públicas con fines proselitistas.
Al menos nueve aspirantes a gobernadores de la disidente Alianza Democrática y siete de la Mesa de la Unidad también incurrieron en proselitismo, una violación a la norma electoral, según el informe de la Red de Observación.
Hubo, asimismo, no menos de 20 alocuciones de Maduro en el canal estatal Venezolana de Televisión a favor de sus candidatos para este domingo.
4. Bajo la lupa internacional
La campaña de las elecciones regionales tuvo la particularidad de estar bajo la lupa de observación internacional calificada por primera vez en años.
La Unión Europea, la ONU y el Centro Carter se cuentan entre los que observan el proceso electoral.
La misión de observación electoral europea tenía 15 años sin cumplir su rol en Venezuela. El Centro Carter, asimismo, rompe con un ciclo de ocho años sin participar como observador en elecciones en el país suramericano.
La cifra de observadores nacionales e internacionales autorizados por el CNE significa “destacables avances” en materia electoral, según concluyó un informe del Observatorio Global de Comunicación y Democracia (OGCD).
5. Las inhabilitaciones
Quienes no están en las elecciones regionales también fueron noticia en los días previos de las votaciones. El CNE venezolano precisó que 17 candidatos inscritos no podrían participar por inhabilitación política de parte de la Contraloría General de la República.
“La mayoría de estas inhabilitaciones fueron aplicadas luego de que los dirigentes se hubieran inscrito”, dijo el Observatorio Global de Comunicación y Democracia en su informe «Entre luces y sombras, el camino al 21N».
Esas restricciones se bautizaron como “inhabilitaciones exprés”.
Leocenis García, candidato a la alcaldía del municipio Libertador, y Eduardo Samán, postulado por el Partido Comunista de Venezuela al mismo cargo, son dos de los políticos de mayor renombre en esa lista divulgada por el CNE.
6. El reinado del “voto entubado”
El llamado “voto entubado”, cuando un solo click sobre la pantalla del tarjetón electoral permite votar por varios candidatos de un mismo bloque político, fue uno de los mensajes más promocionados por los candidatos en Venezuela.
El nuevo sistema automatizado de votación parece privilegiar el “voto entubado” debido a “imprecisiones” en el diseño del tarjetón electoral, nota el Observatorio Global de Comunicación y Democracia en su más reciente reporte.
El llamado voto cruzado, cuando un elector prefiere apoyar por candidatos de distintos partidos para diferentes cargos, se dificulta en esta ocasión.
“En una elección con más de 70.000 aspirantes y poco más de 3.000 cargos a elegir, esta circunstancia adquiere particular importancia”, reza el informe.
Voz de América