Un soldado murió y tres más sufrieron heridas graves en varios ataques simultáneos con explosivos perpetrados este jueves contra bases militares cerca de los límites de Colombia con Venezuela, según autoridades.
El alto mando militar colombiano atribuyó la ofensiva al Ejército de Liberación Nacional (ELN), reconocida como la última guerrilla del país.
En una primera acción, perdió la vida el soldado Faider Martínez a causa de los explosivos que impactaron un puesto del ejército en el municipio de Chiriguaná, en el departamento de Cesar.
Poco después, otra base fue atacada en la vecina localidad de Aguachica. Dos militares resultaron con lesiones «de consideración», señaló el ejército en un balance entregado a los medios.
Un tercer ataque se registró en el municipio de Ocaña, en el departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela.
Siete artefactos alcanzaron el Batallón Santander. Un suboficial resultó herido y la base tuvo «algunos daños de consideración», relató a W Radio el responsable del ejército en esa región, el general Omar Sepúlveda, quien culpó de la agresión a «bandidos del ELN».
El ELN aseguró en Twitter haber atacado otras cuatro instalaciones militares durante la madrugada.
Todos las bases están a menos de 100 kilómetros de la frontera con Venezuela, donde según el gobierno de Iván Duque se refugian grupos armados colombianos con el beneplácito de las autoridades venezolanas.
Caracas siempre ha negado las acusaciones. Ambos países rompieron relaciones diplomáticas poco después de la llegada de Duque al poder en Colombia, en agosto de 2018.
La violencia en la zona fronteriza ha dejado decenas de muertos desde comienzos de año.
Según el general Sepúlveda, en la zona también operan disidentes de la guerrilla FARC, que se apartaron del pacto de paz firmado en 2016, y el Clan del Golfo, la principal banda narco del país.
Estas organizaciones se disputan a sangre y fuego las rutas del narcotráfico y el contrabando en la porosa frontera de 2.200 kilómetros.
Colombia vive el peor rebrote de violencia desde el desarme de la que fuera la guerrilla más poderosa de América. Grupos armados luchan por el control de regiones apartadas donde operaban las FARC.
AFP.