Joe Biden, presidente de los Estados Unidos, abandonó sus planes para dar dos años de educación terciaria de manera gratuita, dijo el lunes la esposa de la nación, Jill Biden.
La primera dama dijo que cualquier versión que surja del estancado proyecto de gasto social de su marido, conocido como «Build Back Better» (BBB, Reconstruir mejor), no tendrá fondos para cubrir la matrícula en los programas de dos años de educación terciaria.
«Joe ha tenido que hacer concesiones. El Congreso aún no ha aprobado el Build Back Better. Y la universidad comunitaria gratuita ya no es parte de ese paquete», afirmó en un discurso en Washington.
En Estados Unidos, las universidades comunitarias («community colleges») ofrecen cursos de educación superior de dos años que valen en sí mismos, o pueden usarse como inicio de programas de cuatro años en otras universidades, facilitando la costosa educación terciaria de muchos estadounidenses.
Joe Biden, cuyo plan BBB pretende destinar 1.800 millones de dólares a gastos sociales y medioambientales, incluía esta reforma muy significativa en un país donde los estudios superiores pueden ser extremadamente caros.
El BBB fue aprobado en la Cámara de Representantes, pero el presidente demócrata no logró que el Senado lo aprobara debido a la renuencia en particular de un senador demócrata.
El mandatario prometió salvar algunos fragmentos de su ambiciosa iniciativa, pero tuvo que sacrificar otros.
Jill Biden, que enseña inglés en un «community college» en el estado de Virginia, se dijo «decepcionada», pero prometió seguir luchando por los estudiantes de todo el país.
Según la empresa de investigación especializada Education Data Initiative, en 2021 el costo promedio en Estados Unidos de los estudios en un «community college» fue de casi 7.500 dólares por los dos años.
Las cuentas de las universidades estadounidenses privadas más prestigiosas son mucho más altas, lo que resulta en una acumulación de deuda estudiantil en Estados Unidos.
Según Education Data Initiative, la deuda estudiantil asciende actualmente a 1,75 billones de dólares, y son deudores más de 43 millones de estadounidenses.
El monto se disparó: en 2010 era de 760.000 millones de dólares.
Cuando llegó a la Casa Blanca, Joe Biden instauró una moratoria sobre la deuda estudiantil, que se ha prorrogado varias veces y que expirará el 1 de mayo.
AFP