Las autoridades de Indonesia anunciaron este martes haber alcanzado un máximo de nuevas infecciones por coronavirus, en tanto la variante ómicron se propaga rápidamente en este archipiélago del sureste asiático.
El número de casos diarios superó los 57.000, de acuerdo al grupo de trabajo gubernamental para covid-19, superando así el tope anterior de 56.757 casos, en julio del año pasado, en la cresta de la ola de la variante delta en este país.
«La cifra a nivel nacional de casos positivos por coronavirus en esta tercera oleada aumentó de manera considerable y más rápido en comparación con la segunda», indicó ante la prensa Wiku Adisamito, portavoz de ese grupo de trabajo.
No obstante, como suele ocurrir, la tasa de mortalidad es mucho más baja respecto a la oleada de delta, durante la cual Indonesia reportó unas 2.000 muertes diarias.
El año pasado, este país se vio gravemente afectado por la pandemia, y los hospitales no dieron abasto en cuanto a cantidad de camas y oxígeno médico para poder tratar al enorme número de pacientes.
Este martes, Indonesia informó sobre 134 nuevas muertes por covid-19, en tanto la tasa de ocupación de camas en los hospitales es de alrededor del 33%, contra más del 77% durante la eclosión de la variante delta.
En este mes, el gobierno impuso restricciones más estrictas en locales públicos, oficinas, centros comerciales y restaurantes de varias ciudades, no obstante, ha ido acortando de manera progresiva el periodo de cuarentena exigido a viajeros vacunados que llegan desde el exterior.
Hasta la fecha, Indonesia ha constatado 4,9 millones de contagios y más de 145.000 muertes.
El desarrollo de la campaña de vacunación continúa siendo lento, con sólo la mitad de su población, de 270 millones de habitantes, inoculada con dos dosis de suero, en tanto las autoridades bregan para conseguir vacunas suficientes.
AFP