El presidente de Sudán, Omar Hasán al Bashir, ha presentado su dimisión para dar paso a un consejo de transición que gestionará el rumbo del país, según han informado fuentes gubernamentales y un ministro provincial.
Bashir cumplirá arresto domiciliario, su guardia personal fue reemplazada y se encuentra bajo estricta vigilancia. Gobernó Sudán durante tres décadas. La Corte Penal Internacional lo acusa de crímenes de guerra y genocidio por las acciones de su gobierno en Darfur.