Ciudad de México y municipios vecinos reducirán al mínimo su nivel de alerta por la COVID-19 al mantenerse una tendencia a la baja en los contagios, informaron las autoridades.
«Se abren todas las actividades, todas, sin restricciones, a partir del próximo lunes», dijo la alcaldesa capitalina, Claudia Sheinbaum, en rueda de prensa. El nivel de riesgo había sido elevado en enero ante el veloz avance de la variante ómicron.
México se rige por un semáforo de cuatro colores, del verde al rojo, para determinar el peligro ante el coronavirus y establecer aforos y actividades permitidas.
El vecino estado de México, varios de cuyos municipios conforman con la capital un área urbana de más de 20 millones de habitantes, también reducirá al mínimo su nivel de alerta desde el lunes.
Sheinbaum explicó que se pedirá a las universidades, que siguen con clases a distancia, reanudar sus actividades presenciales y llamó a las empresas privadas a regresar a sus oficinas de manera gradual.
Según la alcaldía, los contagios se han reducido 96% en comparación con el máximo registrado el 17 de enero, provocado por la llegada de ómicron.
Pese a que el nivel de alerta en la megaurbe y gran parte de México se elevó desde enero, la mayoría de las actividades se han mantenido abiertas.
Desde principios de febrero, el gobierno federal aseguró que la pandemia iba a la baja, tendencia que se ha mantenido.
México, con 126 millones de habitantes, está avanzando en la aplicación de la dosis de refuerzo de la vacuna contra la COVID-19.
Según cifras de la Secretaría de Salud, hasta el jueves habían sido vacunados 85,2 millones de habitantes.
México acumula 5,5 millones de contagios y 319.296 defunciones por la COVID-19. En la capital se han registrado 1,3 millones de casos y 42.220 defunciones.
AFP.