La emblemática precesión de Domingo de Ramos, con la imagen del Divino Maestro, que desde hace más de 100 años se hacía en horas de la noche en el casco central de la capital de Anzoategui , tuvo que realizarse este año a plena luz del día.
La razón obedece a los apagones que se registran todas las noches en las inmediaciones de la Catedral de Barcelona y de la sede de la Sociedad del Divino Maestro, donde es guardada la imagen.
«Ni policías, ni funcionarios de Protección civil participaron en el recorrido de la precisión para brindar resguardo», dijo una devota, además hubo poca afluencia de feligreses.