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Los tanques rusos están a las puertas de Kyiv y la UE prevé millones de refugiados

Los tanques rusos llegaron el jueves a las puertas de Kyiv, en su estrategia de rodear las grandes ciudades de Ucrania, provocando un éxodo masivo en dirección a países de la Unión Europea (UE), que se prepara para recibir a «millones» de refugiados.

Las operaciones militares siguieron en paralelo de las primeras negociaciones de alto nivel entre Rusia y Ucrania, donde no se logró el objetivo de un alto el fuego en el conflicto que el presidente Vladimir Putin iniciara el 24 de febrero.

Estados Unidos y sus aliados de la UE afirmaron que estaban estudiando nuevas sanciones contra Rusia por las señales de «intensificación» de ataques contra civiles.

En el terreno, un equipo de la AFP vio columnas de humo en la localidad de Skybyn, a pocos centenares de metros del último puesto de control en el límite noreste de Kyiv.

Los tanques rusos ya habían llegado a los suburbios norte y oeste.

A cinco kilómetros de la capital, la localidad de Velyka Dymerka fue objetivo de cohetes Grad rusos.

Según el Estado mayor ucraniano, las fuerzas rusas siguen avanzando para rodear Kyiv sin descuidar otros frentes, como las ciudades de Izium, Petrovske, Sumy, Ojtyrka y la región del Donestsk.

– «Corredores humanitarios» hacia Rusia –

La reunión entre los ministros de Relaciones Exteriores de Rusia y Ucrania, Serguéi Lavrov y Dmytro Kuleba, en la localidad turca de Antalya, no registró ningún resultado tangible para el cese de las hostilidades.

Kuleba indicó sin embargo que ambos cancilleres habían decidido «proseguir sus esfuerzos», aunque «Ucrania no se ha rendido, no se rinde y no se rendirá», agregó.

Lavrov dijo su país estaba dispuesto a seguir conversando en el mismo formato de los tres primeros encuentros de altos funcionarios en Bielorrusia y que una reunión entre Putin y el mandatario ucraniano, Volodimir Zelenski, estaba por ahora descartada.

Ante la imposibilidad de alcanzar un acuerdo de alto el fuego, el ministro ruso dijo que Moscú quería «hablar de corredores humanitarios», para evacuar a civiles de las ciudades sitiadas.

Por la noche, el gobierno ruso anunció que, incluso sin acuerdos, su ejército abriría «corredores humanitarios» desde esas localidades hacia Rusia.

En Turquía, Lavrov reiteró que Rusia «no atacó Ucrania», sino que respondió a «amenazas directas contra (su) seguridad», e insistió en la desmilitarización y la neutralidad de la exrepública soviética.

El ministro también calificó de «peligroso» la entrega de armas de los países occidentales a Kyiv.

– 80.000 evacuados en dos días –

Rusia mantiene el asedio de las grandes ciudades ucranianas y miles de civiles llevan días protegiéndose de los bombardeos en sótanos y refugios improvisados. En algunos puntos, la situación humanitaria es crítica, según testigos.

Según un representante del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Sasha Volkov, los habitantes de Mariúpol, un puerto estratégico del mar de Azov, «han empezado a pelearse por la comida».

«Todas las tiendas y las farmacias fueron saqueadas hace cuatro o cinco días» agregó Volkov desde la ciudad, en una grabación de audio enviada a los medios.

El clamor de indignación se acrecentó tras el bombardeo el miércoles de un hospital pediátrico de esa localidad, que dejó al menos tres muertos, entre ellos un niño, según el alcalde.

El presidente francés, Emmanuel Macron, calificó el bombardeo de «acto de guerra indigno», a su llegada a una cumbre de la Unión Europea (UE) en el Palacio de Versalles (oeste de París) consagrada a los impactos de la guerra ruso-ucraniana.

Rusia negó que su aeronáutica hubiese realizado misiones de ataque en la zona de Mariúpol y afirmó que «el supuesto bombardeo aéreo es una completa provocación puesta en escena para mantener el revuelo antirruso entre una audiencia occidental»

En Kyiv, la mitad de la población huyó desde el inicio de la invasión, informó el alcalde, Vitali Klitschko.

Y más de 80.000 personas fueron evacuadas en dos días de la ciudad sitiada de Sumy y de los alrededor de Kyiv, señaló el gobierno ucraniano.

En dos semanas, la UE ha recibido más de 2 millones de refugiados ucranianos, un número sólo comparable a la afluencia de solicitantes de asilo, en su mayoría sirios, entre 2015 y 2016

La comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, cree que el flujo no ha parado.

«Vamos a ver a más y más personas huyendo de Ucrania (…) No sabemos exactamente cuántas, pero diría millones», afirmó la comisaria sueca, considerando que se trata de «un desafío muy grande» que los 27 deberán afrontar,

– Sanciones, pero sin ‘vía rápida’ a la UE –

La cumbre europea de Versalles no debería dar continuación a la petición ucraniana para adherirse a la UE por procedimiento expreso.

«No hay una vía rápida para el acceso. Eso no existe», dijo el primer ministro de los Países Bajos, Mark Rutte.

Desde el inicio de la invasión, Estados Unidos y sus socios de la OTAN apoyan a Kyiv pero evitan implicarse directamente en el conflicto.

Sin embargo, la Cámara de Representantes de Estados Unidos adoptó un nuevo presupuesto federal que incluye una partida de casi 14.000 millones de dólares para ayuda a Ucrania, en forma de asistencia humanitaria, armas y municiones.

El ministerio ruso de Defensa acusó a Estados Unidos de haber financiado un programa de armas biológicas en Ucrania y afirmó que había encontrado pruebas al respecto en laboratorios ucranianos.

En Rusia, las sanciones occidentales empiezan a pesar en la población. Las últimas empresas extranjeras en marcharse fueron los gigantes japoneses del videojuego Sony y Nintendo.

Putin advirtió que las sanciones pueden provocar un aumento de la inflación mundial por la subida de los precios de los alimentos, ya que Rusia no podrá exportar suficientes fertilizantes. Por ahora, dijo el mandatario, Rusia sí mantendrá todas sus entregas de hidrocarburos a pesar del conflicto.

Los miembros de potencias industrializadas del G7 pidieron a los países productores de gas y petróleo «aumentar sus entregas» para hacer frente a la subida de precios de la energía y los riesgos de escasez derivados de la invasión de Ucrania.

AFP.