El multimillonario Elon Musk desafió el lunes al presidente ruso, Vladimir Putin, a un «combate» cuerpo a cuerpo. ¿El trofeo? Nada menos que Ucrania, escenario de una ofensiva del ejército ruso desde hace casi tres semanas.
«Por la presente desafío a Vladimir Putin a un combate (cuerpo a cuerpo). El premio es Ucrania», escribió en Twitter el fundador de la compañía espacial SpaceX, sin precisar la forma que tomaría este duelo.
«¿Acepta esta pelea?», preguntó Musk en otro mensaje en ruso, dirigiéndose directamente a la cuenta oficial en inglés de Twitter del Kremlin. Y ante la incomprensión de uno de sus más de 77 millones de seguidores, aseguró que hablaba «completamente en serio».
No hubo una respuesta inmediata del gobierno ruso.
El multimillonario nacido en Sudáfrica manifestó previamente su apoyo a Kiev, tuiteando «Ucrania, aguanta» a principios de marzo, al tiempo que saludaba «al gran pueblo de Rusia, que no quiere» la guerra.
También respondió a un pedido de ayuda de un funcionario ucraniano activando el servicio de Internet satelital Starlink en Ucrania y enviando equipos a ese país para ayudar a llevar conectividad a las áreas afectadas por ataques militares rusos.
Musk está acostumbrado a la polémica en Twitter.
En febrero acusó al regulador bursátil estadounidense, que le impuso varias sanciones, de buscar amordazar su libertad de expresión, y comparó al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, con Adolfo Hitler en un mensaje de apoyo a los opositores a las restricciones sanitarias impuestas por el gobierno. Luego borró esa publicación.
AFP