Alrededor de 410 cadáveres fueron recuperados en la ciudad ucraniana de Bucha, situada en los alrededores de la capital, Kiev, desde la retirada de las fuerzas rusas de la localidad, en medio de las acusaciones contra Rusia por su responsabilidad en las matanzas, según ha informado este lunes un medio ucraniano.
Las autoridades de Kiev denunciaron la masacre cometida por el ejército ruso en esa ciudad del norte del país, que fue asediada y bombardeada durante semanas y en la que, al ser recuperada por las tropas del país, se encontraron cientos de cadáveres en sus calles, la mayoría de ellos civiles.
Según las informaciones facilitadas por el diario Ukrayinska Pravda, que cita a los servicios funerarios de Bucha, “en total se han encontrado entre 330 y 340 cuerpos en Bucha, pero hay más”, precisó.
Más tarde, la fiscal general ucraniana, Iryna Venediktova, señaló que se habían recuperado los cuerpos de 410 civiles.
Algunos de los cadáveres tenían las manos atadas a la espalda y con heridas de bala en la cabeza.
“Recogimos 15 cuerpos de la calle Yablunska cuyas manos habían sido atadas y que habían recibido un disparo en la cabeza. Hoy [el 3 de abril] encontramos 30 cuerpos”, describieron las fuentes.
Según Serhiy, otro empleado del servicio funerario de Bucha que también cita el diario local, los trabajadores están sobrepasados y no pueden seguir con estas tareas de recuperación de cuerpos.
“No tenemos tiempo. Hay al menos 20 direcciones más para hoy. Mucha gente está enterrada en los jardines de las casas. No podemos determinar un número exacto. Aún no hay listas. Hemos enterrado al menos 350 personas”, dijo.
El alcalde de Bucha, Anatoly Fedoruk, dijo a AFP que 280 cuerpos fueron llevados a fosas comunes porque era imposible enterrarlos en los cementerios que están al alcance de los disparos.
La firma de imágenes satelitales Maxar presentó fotos que indicó son de una fosa común en el predio de una iglesia local.