La policía de Sacramento, California, anunció el lunes el arresto de un primer sospechoso tras el tiroteo que el domingo dejó al menos seis muertos y 12 heridos en esa ciudad de Estados Unidos, uno de los peores desde el inicio del año.
«Los investigadores identificaron a Dandre Martin, de 26 años, como sospechoso. Martin fue arrestado por agresión y por posesión ilegal de un arma de fuego», indicó la policía en un comunicado.
Previamente las autoridades anunciaron que varios tiradores estaban involucrados y que se había encontrado una pistola robada. Tres de los muertos eran mujeres y los seis cuerpos ya fueron identificados.
Las autoridades no precisaron la manera como estalló el enfrentamiento, ni si los disparos estaban dirigidos a personas en particular o si los autores abrieron fuego al azar.
El tiroteo ocurrió alrededor de las 02H00 locales del domingo, hora en la que cierran los bares y discotecas. Un video que circula en redes sociales parece mostrar una pelea de varias personas en la calle y varios individuos corriendo.
«No sabemos si esta pelea realmente desencadenó el tiroteo. Ahora estamos revisando todos los detalles», había declarado el portavoz de la policía Zachary Eaton a Los Angeles Times.
Los hechos tuvieron lugar cerca del parlamento local y del escenario donde juegan regularmente el equipo de baloncesto Sacramento Kings, precisó Kathy Lester, jefa del departamento de Policía de la capital californiana, en la costa oeste de Estados Unidos.
Lester aseguró además que los agentes fueron alertados por el ruido de disparos y a su llegada descubrieron una «multitud» y «varias víctimas de heridas de bala».
En el lugar los investigadores encontraron «más de un centenar de casquillos» y «al menos tres edificios y tres vehículos con impactos de arma de fuego», agrega el comunicado de la policía.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, hizo el domingo un llamado a la acción: «Estados Unidos llora una vez más por una comunidad devastada. Debemos hacer más que estar de luto, debemos actuar», dijo en un comunicado, a la vez que reiteró su llamado al Congreso para que apruebe una legislación que refuerce las restricciones a las armas de fuego.
Según el programa Small Arms Survey, en 2017 había unas 393 millones de armas de fuego en Estados Unidos, es decir, más armas que habitantes. El derecho a poseer un arma está garantizado por la Constitución.
Se trata del último tiroteo masivo en Estados Unidos, donde las armas de fuego causan unas 40.000 muertes al año, incluidos suicidios, según el sitio web Gun Violence Archive.
AFP.